Los ingresos en el exterior de las empresas cotizadas en la Bolsa española ascendieron en 2012 hasta 323.109 millones de euros, cifra que supone un 60% de la facturación total y representa un crecimiento del 12,83% respecto al ejercicio precedente.
De este modo, las empresas españolas han podido mitigar en parte los efectos de la crisis económica que afectan al mercado interior -donde los ingresos crecieron tan solo un 0,35% hasta 209.609 millones- y registraron un crecimiento en su facturación total del 7,57% hasta 532.719 millones, según un informe elaborado por el servicio de estudios de Bolsas y Mercados Españoles (BME), el operador de todos los mercados de valores y sistemas financieros en España.
Por tanto, las ventas en el exterior adquieren cada vez mayor importancia en los balances de las 112 empresas que han sido analizadas, y están compensando "el estancamiento sufrido por la facturación interior, que se está viendo lastrada por la atonía de la demanda interna global y un producto interior bruto en descenso", tal como ha señalado el informe de BME.
En lo que respecta al desglose de ingresos del mercado exterior, estos quedan conformados de la siguiente manera: el 31,65% (102.267 millones) corresponde a países de la Unión Europea (UE), el 27,34% procede de países de la OCDE excluidos los de la UE (88.336 millones), y el 41,01% del resto del mundo (132.506 millones).
Tecnología y telecomunicaciones facturan un 75% fuera de España
A nivel sectorial, tres áreas económicas facturan más de un 70% fuera de España: tecnología y telecomunicaciones (74,6%), bienes de consumo (72,6%), y materiales básicos, industria y construcción (72,08%). Les sigue muy de cerca servicios de consumo, que origina en el exterior el 66,94% de su facturación.
Un caso paradigmático del sector de las telecomunicaciones es Telefónica, que ha presentado este miércoles los resultados del primer trimestre de 2013 en el que obtuvo un beneficio de 902 millones de euros. En ellos se constata que Latinoamérica supone ya el 51% de los ingresos consolidados de la multinacional española y Brasil se ha convertido en el principal mercado de la compañía por ingresos.
Dentro del sector de bienes de consumo, el mejor ejemplo lo tenemos en el gigante textil Inditex, cuya facturación el pasado ejercicio se distribuyó de la siguiente manera: España concentró el 21%, frente al 25% que representaba un año antes, mientras que Asia elevó su peso del 18 al 20%, América del 12 al 14% y Europa (excluido España) se mantuvo en el 45%. Esta diversificación geográfica permitió a la propietaria de Zara mejorar un 22% en 2012 su resultado respecto a 2011. De esta manera, a pesar del descenso del consumo en España, registró un beneficio neto de 2.361 millones de euros.
Sin embargo, ha sido la construcción el sector que se ha volcado en la conquista de nuevos mercados ante el parón de la obra pública y del sector residencial en España. Las seis grandes constructoras cotizadas (ACS, Acciona, FCC, Sacyr, Ferrovial y OHL) tenían a cierre del tercer trimestre de 2012 el 81,2% de las obras pendientes de ejecutar en el exterior.
Son precisamente los sectores de materiales básicos, industria y construcción y de bienes de consumo los que más aumentan los ingresos derivados de su facturación exterior, al crecer un 24,99% y un 20,87% respectivamente.
Petróleo y energía suben sus ventas en el exterior un 17%
En el sector de petróleo y energía las ventas en el exterior aumentaron el pasado año un 17,53%. No obstante, estas todavía suponen menos de la mitad de la facturación al aportar el 45,23% al total de ventas.
Aquí encontramos a Iberdrola, el primer grupo energético español y una de las cinco mayores compañías eléctricas del mundo con presencia en cerca de 40 países. La eléctrica presidida por Ignacio Sánchez Galán obtuvo un beneficio neto de 2.840,7 millones en 2012, el 1,3% más que en el ejercicio anterior, gracias a que el negocio internacional compensó la caída del mercado nacional. Así, el resultado neto fuera de España fue de 1.979 millones (el 70% del total), un 35% superior al de 2011.
Por otra parte, el único sector en el que las ventas en el exterior pierden importancia relativa es el de servicios financieros e inmobiliarios, ya que sus ingresos internacionales han descendido hasta el 57,42% del total frente al 58,26% del año 2011.