El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha pedido este viernes "acciones" al Banco Central Europeo (BCE) que pongan fin a la actual fragmentación de los mercados de crédito y que permitan fijar un "tipo de interés único" en Europa para las empresas de la misma calidad. Tras la sesión del Eurogrupo, Mario Draghi ha asegurado que el BCE está determinado a que el crédito llegue a la economía real, pero que hay razones por las que no lo hace, como el temor de la banca a prestar por la desconfianza.
De Guindos ha asegurado cree que la UE debe examinar lo que "no hemos hecho bien" en materia de política económica porque es la única zona del mundo que no crece. "La financiación del crecimiento económico va a ser uno de los asuntos prioritarios en esta reunión informal", ha asegurado el ministro a su llegada al Eurogrupo que se celebra este viernes en Dublín.
El ministro ha dicho que las empresas españolas "muy solventes están pagando un diferencial de tipos de interés" respecto a sus competidoras de los países del norte. "Está roto el mecanismo de transmisión de la política monetaria y eso requiere acciones. Acciones que, yo creo, que el primer interesado en poner en marcha es el propio BCE, y ahí es donde vamos a estar", ha resaltado Guindos. En su opinión, la medida "fundamental" para acabar con esta fragmentación es la creación de una unión bancaria en la eurozona.
Estas palabras del ministro insisten en la línea defendida por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, cuando señaló que la UE debe hacer "un esfuerzo mayor y urgente" para ayudar a los estados miembros e instó a los socios europeos a abordar la reforma del BCE para que tenga las mismas competencias que la Reserva Federal, el Banco de Inglaterra o el Banco de Japón.
Draghi: "Deben estar activos gobiernos y bancos centrales"
"Estamos reflexionando sobre esto y estamos determinados a garantizar que todos los fondos que se están inyectando en la economía no se paren en términos de liquidez sino que acaben llegando para financiar al sector real, a las pymes y los hogares", ha dicho en la rueda de prensa posterior al Eurogrupo el presidente del BCE.
Mario Draghi ha destacado que la fragmentación del crédito se está reduciendo y que todos los indicadores, tanto las primas de riesgo como los indicadores de volatilidad, "han mejorado dramáticamente". "Las condiciones de financiación para la eurozona son ahora mucho más expansivas y acomodaticias y la posición de nuestra política monetaria sigue siendo muy acomodaticia", ha subrayado.
Además, ha sostenido que la mayoría de los bancos españoles no tienen dificultades de financiación, ya que han devuelto las inyecciones de liquidez a tres años del BCE con dos años de antelación. "Algunas de las mayores devoluciones han venido de hecho de España, lo que muestra que la mayoría de los bancos españoles han superado los problemas de financiación", ha apuntado.
"Otra razón es que los bancos están asustados y no prestan (...) Ahora los bancos no pueden prestar a empresas no viables, pero tienen que superar sus miedos y confiar en sus economías", ha afirmado una vez más el banquero italiano.
Para quien el último factor que a su juicio puede explicar la restricción del crédito es la falta de capital, pero este problema no puede ser resuelto por el BCE sino que debe ser abordado por las autoridades nacionales. "Está bastante claro que para ser activos en este frente se necesita que estén activos los gobiernos y bancos centrales", ha señalado.
Tras las declaraciones de Draghi, Luis de Guindos ha asegurado que corregir la fragmentación del mercado de crédito no es tanto una cuestión de liquidez sino de avanzar en la unión bancaria y se mostró convencido de que el Banco Central Europeo (BCE) ya estudia medidas para hacer frente a este problema.
"No se trata tanto de una cuestión de liquidez. En una unión monetaria, para que no exista una fragmentación de los mercados de crédito, en la que las empresas de la misma calidad crediticia pagan diferentes tipos de interés, es fundamental avanzar en la unión bancaria. Ese es el tema fundamental y la modificación básica que tenemos que hacer", en Europa, ha afirmado el ministro a la prensa española, recoge Efe.
Un nuevo plan de reformas para fomentar el crecimiento
Al ser preguntado por si espera que el Eurogrupo respalde dar dos años más a España para situar el déficit en el 3% del PIB, Guindos dijo a su llegada que no se abordaría en Dublín, algo que también han confirmado el presidente del Eurogrupo y el vicepresidente económico de la Comisión Europea.
Olli Rehn ha destacado en la rueda de prensa posterior al Eurogrupo que "no hay nada nuevo" sobre una relajación en el objetivo de déficit para España, por lo que el Ejecutivo europeo seguirá con su camino: no se tratará el asunto hasta conocer las previsiones de primavera de la Comisión y las reformas del Gobierno de España.
De Guindos ha reiterado que el Gobierno aprobará el 26 de abril el nuevo programa de estabilidad, que definirá "el marco fiscal a medio plazo" y también un nuevo plan de reformas. A su juicio, las reformas "tienen que ir hacia el fomento del crecimiento económico". "En estos momentos, el crecimiento económico es algo que está faltando en Europa, es uno de los problemas fundamentales".
"Mientras otras zonas económicas del mundo como Estados Unidos, los mercados emergentes, Japón han vuelto a crecer, sin embargo, Europa se está volviendo a quedar detrás", ha apuntado Guindos. "Tenemos que pensar sobre ello, ver lo que no hemos hecho bien y ver lo que se puede hacer para evitar una situación que está golpeando al bienestar de los europeos", ha insistido.