La presidenta de Argentina, Cristina Fernández, lanzó este domingo duras críticas a los jueces que fallan en contra de las leyes votadas por el Parlamento en un festival popular de fuerte contenido político, con el conflicto por la Ley de Medios Audiovisuales como telón de fondo.
La mandataria pronunció esta noche un encendido discurso en un acto en la Plaza de Mayo, frente a la sede del Ejecutivo, en el marco de un festival popular organizado por el Gobierno para celebrar el Día Internacional de los Derechos Humanos y el vigésimo noveno aniversario del retorno de Argentina a la democracia, que se conmemorarán este lunes.
El festejo popular, que incluyó varios números musicales, coincide además con la celebración del primer año del segundo mandato de Fernández, que encuentra a su Gobierno volcado de lleno a un conflicto con el grupo Clarín, el mayor conglomerado mediático del país, por la aplicación de la Ley de Medios Audiovisuales. Precisamente, el jueves pasado un tribunal extendió una medida cautelar solicitada por Clarín que frena la aplicación de esta norma y el Gobierno, impulsor de esa ley en 2009, recurrió a la Corte Suprema.
Con este telón de fondo, Fernández reivindicó este domingo la figura de su esposo y antecesor, el fallecido Néstor Kirchner (2003-2007), quien, afirmó, renovó la composición de la Corte Suprema y "quería una Justicia independiente y la renovación profunda de ese poder que seguía formando parte de algún sector privilegiado". "Es importante que hoy todos juntos valoremos esta democracia y demandemos mayor profundización de la democratización de los tres poderes del Estado. Es imprescindible que la independencia no solo sea del poder político sino también del poder de las corporaciones", afirmó Fernández. "No lo digo únicamente por la Ley de Medios. Lo digo porque hay jueces que dejan en libertad a personas que vuelven a delinquir, a matar, a violar. La gente está cansada de eso", subrayó.
Fernández, exsenadora, sostuvo en su discurso transmitido por la cadena oficial de radio y televisión que a los integrantes del Ejecutivo y del Legislativo "se les exige una conducta decorosa". "Nosotros también exigimos a todos los jueces del Estado la misma conducta, de independencia y respeto a la voluntad popular, a la voluntad del Parlamento", dijo. "Si no se respetan las leyes votadas en el Congreso, ¿de qué democracia estamos hablando? Quiero una democracia plena y profunda, comprometida, sin privilegios", añadió Fernández ante una Plaza de Mayo colmada de militantes kirchneristas, agrupaciones sociales y sindicales afines al Gobierno.
“Quiero una democracia plena y profunda, comprometida, sin privilegios“
La mandataria recordó que el poder económico "minoritario y ultraconcentrado" fue cómplice de la última dictadura militar (1976-1983) y pidió a las fuerzas armadas que "tomen conciencia de cómo fueron utilizadas por esos grupos concentrados para luego lavarse las manos".
"Somos como la cigarra"
Fernández dijo que antes era usual escuchar que con cuatro portadas adversas "de un determinado periódico" se sepultaba a un Gobierno, pero que el suyo ha demostrado que "se puede gobernar con feroces ataques mediáticos". "Ahora alguien dice por ahí que con cuatro fallos judiciales se cae el Gobierno. Quiero darles certeza de que somos como la cigarra, que la matan una y mil veces y nos levantamos de las cenizas una y mil veces mas, apoyados en nuestras convicciones y realizaciones", aseveró.
"Tengo una inmensa responsabilidad, la de llegar a buen puerto este barco que es la Argentina. Es muy difícil ser presidenta de un país. Ser presidenta de Argentina cuesta un poco más que en otros países. Yo tengo la fuerza que me dan ustedes. Solo aflojo si ustedes aflojan. Voy a seguir atajando penales y goles en contra todos los días", añadió la mandataria.
“La presidenta asegura que seguirá firme en sus "convicciones"“
Al recordar a Kirchner, fallecido en octubre de 2010, Fernández dijo que "hace unos meses estaba enojada" porque pensaba que la "había abandonado". "Pero ahora siento que nunca me va a abandonar porque sé que está presente en cada uno de ustedes", afirmó.
Los festejos en la Plaza de Mayo, que se replicaron en plazas de otras treinta ciudades del país, se iniciaron esta tarde con expresiones artísticas en las calles y siguió luego con recitales de cantantes como Charly García y Fito Páez. Antes de su discurso, Fernández concedió el Premio Azucena Villaflor –una Madres de Plaza de Mayo desaparecida en 1977– a varias personalidades destacadas por su defensa de los derechos humanos.