El rey evoluciona "de forma muy favorable" tras la operación de cadera a la que fue sometido el viernes pasado y tras presentar un "avance muy importante" en la última sesión de fisioterapia "se levanta y camina con autonomía por su habitación", según el parte médico difundido este lunes.
El director del Hospital Quirón San José, Javier de Joz, ha leído el parte en el que se especifica que el monarca "sigue descansando por la noche y prosigue con su programa de recuperación avanzada".
Don Juan Carlos fue intervenido quirúrgicamente para implantarle una prótesis en la cadera izquierda, aquejado de una artrosis en esta articulación que le ocasionaba fuertes dolores y problemas de movilidad.
Ha sido su tercera operación de estas características, ya que el pasado 14 de abril se le implantó otra prótesis en la cadera derecha; días más tarde era operado de nuevo por una luxación.
Los médicos no aventuran todavía cuándo podría recibir el alta el jefe del Estado, pero el doctor Villamor apuntó el pasado sábado, tras la intervención quirúrgica, que ello podría ocurrir en tres o cuatro días, con una recuperación completa en el plazo de un mes.
Fuentes hospitalarias han señalado que el jefe del Estado ha pasado muy buena noche, después de que este domingo recibiera la visita de toda la Familia Real, así como del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.
Visitas de la Familia Real, incluido Urdangarín, y Rajoy
Además de la reina y de los príncipes de Asturias, pasaron por el Hospital Quirón San José, donde está ingresado el monarca, la infanta Elena y los duques de Palma, en la primera ocasión en que se ha podido ver públicamente a Iñaki Urdangarin junto al resto de la Familia Real desde hace más de un año.
"Hemos estado todos con él y eso le ha animado mucho", ha manifestado don Felipe tras concluir su visita, en la que los príncipes estuvieron acompañados por las infantas Leonor y Sofía y los duques de Palma por su hijo mayor, Juan Valentín.
La Casa del Rey ha confirmado que la visita de Urdangarin, apartado desde diciembre de 2011 de la agenda oficial de la Familia Real, se produjo a iniciativa de la infanta Cristina.
Su presencia causó gran expectación porque además la semana pasada se supo que el fiscal pide una fianza de 8,2 millones de euros para él y su exsocio Diego Torres en el marco de la investigación del "caso Nóos".