Los catalanes volverán a las urnas el próximo 25 de noviembre en las décimas elecciones catalanas, apenas dos años después de las últimas autonómicas. Esta vez el debate sobre la independencia marcará la campaña electoral que ha arrancado este viernes 9 de noviembre. La crisis económica, con 840.400 parados (171.000 más que hace dos años, según la última EPA) y una tasa de desempleo del 22,56%, quedará en un segundo plano o subordinada al leitmotiv que está marcando la agenda.
El presidente de la Generalitat y candidato de CiU a la reelección, Artur Mas, decidió adelantar finalmente las elecciones después de la multitudinaria manifestación de la Diada y tras su reunión en la Moncloa, en la que Mariano Rajoy se negó a negociar al pacto fiscal.
Desde entonces el debate político se ha polarizado entre los partidos que como CiU y ERC defienden la independencia y los que como PP y Ciutadans se oponen. O sí o no. Una campaña "bipolarizada" en los que formaciones como el PSC pueden quedar, según los expertos en comunicación, en una especie de "tierra de nadie".
El director de Máster en Asesoramiento de Imagen y Consultoría Política (MAICOP) de la Universidad Pontificia de Salamanca, Jorge Santiago, cree que Artur Mas puede estar utilizando el debate identitario como una "cortina de humo" después de dos años en los que el candidato de CiU, como presidente de la Generalitat, ha tenido que poner en marcha duros recortes. "No hablemos de los que nos perjudica y saquemos un tema que nos beneficie", señala este experto.
Para Toni Aira, profesor de Comunicación Política en la Universidad Pompeu Fabra y la Universidad Ramón Llull, cree que hablar de cortina de humo es "una pista falsa", aunque a CiU le beneficie que el debate se centre en la independencia. Aira cree que "reducir el debate que está viviendo en Cataluña a una estrategia de comunicación es simplificar mucho".
En lo que coinciden los expertos consultados por RTVE.es es en que Artur Mas ha tenido una "gran inteligencia política al cambiar el terreno del debate electoral" en el contexto actual, como señala el catedrático de Ciencias Políticas de la Universidad Autónoma de Barcelona, Joan Botella.
La crisis, "un tema subordinado"
En opinión de este experto, "la crisis reaparece como un tema subordinado, todo se supedita al mensaje de que si Cataluña fuera independiente esto no ocurriría". Si gana con una mayoría consolidada, asegura Botella, Mas conseguiría un "éxito internacional sin parangón" al revalidar su mandato a pesar de los recortes.
Salvador Cardús, profesor de Sociología en la Universidad Autónoma de Barcelona y exdecano de la Facultad de Ciencias Políticas, señala que en otras circunstancias el debate sobre los recortes tendría mayor peso, "entre un 60 y 70% del debate público".
Cardús no cree que la crisis desaparezca, sino que "da la impresión de que la gente entiende el pequeño margen de maniobra para hacer políticas distintas (...) Hay que administrar la miseria impuesta por el Gobierno de Madrid que a su vez impone la Unión Europea".
CiU enarbola la bandera del independentismo
A pesar de no incluir la palabra "independencia" en su programa electoral, Artur Mas ha tomado en sus manos esta bandera y se ha puesto a la cabeza en la reivindicación de un referéndum en el que los catalanes decidan si siguen o no dentro de España.
"La bandera de la independencia era la bandera de ERC, pero Mas ha tomado esa bandera y la conduce bien y además ERC está encantado porque sienten que hay un movimiento de opinión y sienten que no se pueden quedar fuera", señala Joan Botella.
Según este catedrático el candidato de CiU "cree sinceramente" que es este movimiento el que le ha "empujado" a adelantar las elecciones, lo que tiene, a su juicio, un efecto muy importante: o te posicionas en contra contundentemente o te sumas a esta corriente".
Las últimas encuestas electorales dan la mayoría a CiU. La incógnita es saber si logrará la mayoría absoluta, como le da el sondeo del Centro de Estudios de Opinión de la Generalitat (CEO) que le adjudica entre 69 y 71(la mayoría absoluta está en 68, seis más de los que tiene actualmente la formación) o se quedará cerca como vaticina el CIS que le da entre 63 y 64.
La incógnita del llamado "voto dual" de CiU
Una de las incógnita de estas elecciones será ver qué hace el llamado "voto dual" de CiU, aquellos votantes que votan a los nacionalistas en las autonómicas pero que en las generales eligen al Partido Popular. Según Botella, un tercio de los votantes 'populares' al Congreso, vota CiU cuando se trata del Parlament.
Salvador Cardús cree que los votos que CiU pudiera perder entre los votantes más conservadores y más alejados de sus posturas soberanistas, podría compensarlos "con creces por lo que ha ganado Artur Mas como líder". Son gente, explica, que nunca votaría a CiU pero que ahora se plantea apoyar al líder".
Toni Aira señala que CiU está potenciado la figura de su candidato por encima de las siglas. Ejemplo de ello es el acto celebrado el pasado 4 de noviembre cuando fue arropado por exdiputados de PSC, ERC y PP.
PP y Ciutadans, en busca del voto no nacionalista
La candidata del Partido Popular a las elecciones catalanas, Alicia Sánchez-Camacho, espera convertir su formación en la segunda fuerza política del Parlament donde ahora cuenta con 18 diputados como tercera fuerza por detrás de CiU y el PSC.
En el caso de los 'populares' la clave reside en saber si el voto no nacionalista opta por sus siglas como contrapeso a CiU. El sondeo del CEO les da entre 18 y 19 diputados por encima de los socialistas, pero la encuesta del CIS vaticina la pérdida de uno o incluso dos escaños.
Toni Aira cree que las posiciones "claras y definidas" de CiU y PP (a favor y en contra de la independencia) pueden jugar a favor de las dos formaciones. Sin embargo, el Partido Popular tiene, en su opinión, dos importantes handicap: la existencia de Ciutadans y que gobiernan en Madrid.
Según este profesor de comunicación política de la Pompeu Fabra, el mensaje de Ciutadans es "más nítido y contundente" que el del PP, que además ha ayudado a CiU a sacar adelante sus presupuestos en esta legislatura, lo que puede aceptar a su "credibilidad".
Además de la existencia de CiU, el PP puede verse perjudicado por ser el partido que Gobierna en España por los recortes que ha puesto en marcha desde la Moncloa.
Para Salvador Cardús, el PP está teniendo una reacción tan "desacertada" planteando "amenazas" frente a la apuesta soberanista de Artur Mas que este especialista cree que el "voto más españolista" podría refugiarse en Ciutadans. Cardús cree que algunos mensajes lanzados desde Madrid en vez de "asustar" o "disuadir" producen "lo contrario".
El CEO le da seis escaños a Ciutadans y el CIS, siete. La formación de Albert Rivera cuenta en la actualidad con tres diputados.
ERC, "en busca de su espacio"
Otra de las incógnitas de estas elecciones será ver qué ocurre con ERC toda vez que CiU ha 'usurpado' parte de su discurso tradicional. "ERC puede crecer menos de lo que pensaba porque la bandera intrépida del independentismo la ha tomado Artur Mas. No obstante, puede haber una parte que acabe votando a ERC porque piense que Mas acabará pactando con Madrid", señala Joan Botella. Sería algo así como votar a los republicanos "para que CiU no se salga del recto camino" que lleva a la independencia.
Toni Aira señala que lo que le toca a ERC es "recomponer su propio espacio" después de haberse presentado hace dos años totalmente dividido. Su candidato, Oriol Junqueras, es una "persona que hace poco ruido", en su opinión, lo que favorecería a la formación que actualmente cuenta con 10 diputados aunque llegó a tener 23. El CIS le da 17 diputados y el sondeo del CEO entre 10 y 14.
El difícil papel del PSC
Todos los expertos consultados por RTVE.es coinciden en destacar el difícil papel que tiene el PSC en unas elecciones donde el debate se articula entre el sí y el no a la independencia. "El PSC está en tierra de nadie, necesita una reestructuración completa y el contexto es perjudicial por la bipolarización entre CiU y PP", afirma Jorge Santiago, de la Universidad Pontificia.
Cardús incide en que las discrepancias entre el PSC en Cataluña, con Pere Navarro apostando por el derecho a decidir, y el PSOE a nivel nacional censurando esta posición tampoco beneficia para nada a la formación federalista.
Joan Botella cree que los "electores progresistas apegados a la identidad española" pueden tener la "sensación de encontrarse desamparados" por la imagen "confusa" que está dando el PSC.
Toni Aira cree que parte de los votantes socialistas podrían ir al PP o Ciutadans. "El PSC por la parte españolista ya ha perdido votos por su indefinición que no contenta ni a unos ni a otros". Incluso, parte del voto de izquierdas más catalanista se podría ir a ICV-EUiA.
El PSC cuenta en la actualidad con 28 escaños (hace dos años ya perdió nueve diputados). El CIS le da 19 y el CEO tan solo 15, la mitad de los que tiene hoy en día.
Iniciativa, el mensaje contra los recortes
Según los sondeos electorales, ICV-EUiA se quedaría con los 10 diputados que tiene (según el CEO) o como mucho subirá un diputado como apunta el CIS. La formación de Joan Herrera no logra rentabilizar su clara oposición a la política económica desarrollada por Artur Mas en los dos últimos años. "En las encuestas no aprovecha los recortes sociales y la crisis económica", señala Salvador Cardús.
Iniciativa defiende el derecho a decidir de los catalanes, pero el primer plano de su mensaje siguen siendo los recortes. Su electorado, señala Botella, está dividido entre un tercio de independentistas, un tercio que respalda el modelo autonómico actual y otro tercio que se decanta por un avance hacia un modelo federal.
Este catedrático de Ciencias Políticas de la Autónoma de Barcelona apunta a que las conocidas como Candidaturas de Unidad Popular (CUP), formaciones municipalistas de izquierdas próximas a los planteamientos del 15M, podría restarle votos a ICV-EUiA y a ERC. Toni Aira cree que las CUP podría restar también votos a Solidaritat, de Alfons López Tena. El CIS le da solo un voto a esta última formación y el CEO directamente, ninguno.