El ministro de Economía español, Luis De Guindos, ha asegurado este sábado en Tokio que "el ambiente es de mucho mayor optimismo con respecto a España" que antes del verano y que "ahora mismo hay interés por la deuda pública española".
De Guindos ha explicado que el ambiente que ha palpado recientemente "tanto en los entornos del Fondo Monetario Internacional (FMI)" como entre analistas privados es "bastante mas positivo que antes del verano", y que esto lo coteja el Tesoro Español con la procedencia de las órdenes de compra.
También se ha referido a la posibilidad de que el Banco Central Europeo active una línea de crédito preventivo que complementaría una compra de bonos españoles, y apuntó a que el hecho de que cada vez se conozcan más detalles sobre mecanismos de ayuda prueba que la estrategia del Gobierno respecto a no precipitar una eventual adhesión a estos programas "era la correcta".
Olli Rehn mostró su apoyo
El comisario de Asuntos Económicos y Monetarios de la UE, Olli Rehn, mostró ayer en la reunión anual que el FMI y el Banco Mundial (BM) en Tokio su apoyo a la posibilidad de poner en marcha esta herramienta en caso de que España solicite el programa de ayuda de la entidad emisora europea.
"Cada vez se ofrece mas información y nos podremos hacer una composición de lugar mas adecuada en las próximas semanas", afirmó De Guindos, en rueda de prensa, con respecto a una eventual decisión de España de solicitar estas herramientas.
En relación a los tiempos del proceso para poner en marcha una unión bancaria en Europa, el ministro español señaló que el interés del Gobierno es que ésta se erija "lo más rápido posible" tanto para los intereses españoles como para los del euro.
"Lo importante", opinó De Guindos "es distinguir entre tener el programa completamente operativo" y el tener "el mandato claro" para poder legislar y constituir los primeros pasos de la unión bancaria.
El ministro, que ayer se reunió con la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, insistió además en que el FMI "refrenda las líneas básicas de la política económica española" en lo referente a saneamiento de bancos, reformas para fomentar crecimiento y ajustes fiscales.