La Fiscalía de Sevilla ha explicado este lunes al jurado del primer juicio del caso Mercasevilla que los cuatro trabajadores acusados pidieron "una comisión ilícita o mordida" a cambio de "hacer su trabajo como funcionarios".
En sus alegaciones previas al jurado que enjuicia el primer sumario del caso Mercasevilla, relativo a la presunta petición de una comisión de 450.000 euros, el fiscal ha afirmado que se trató de una "conducta reprobable" de la que se han conseguido pruebas suficientes, pero ha asegurado que no dudará en retirar los cargos si en la vista no aparecen suficientemente demostrados.
Tanto la Fiscalía como las acusaciones han comenzado recordando que todos los tribunales que han visto este caso han ratificado la legalidad de la grabación en que se recoge que la petición de cohecho fue legal y no violentó derechos.
Luis García Navarro, en nombre de la acusación particular del PP, ha destacado que la comisión se pidió en nombre de un alto dirigente de la Junta, en referencia al exdelegado de Empleo en Sevilla Antonio Rivas, también imputado.
El letrado ha destacado que este sumario dio lugar a la investigación sobre los ERE falsos, convertido en "el mayor caso de corrupción que se ha visto en Andalucía en los últimos años".
Los acusados se declaran inocentes
Los cuatro acusados en el juicio se han declarado inocentes al comienzo de la vista. Entre ellos, el exdelegado de Empleo en Sevilla Antonio Rivas, quien ha precisado que es "totalmente inocente", como viene manifestando "desde el primer día".
Al comienzo del juicio ante un jurado popular, el magistrado presidente ha preguntado a los procesados si se declaran culpables o inocentes del delito de cohecho que les imputa el fiscal y las acusaciones particulares del PP y de los actuales responsables de Mercasevilla.
El exgerente del mercado Fernando Mellet ha afirmado que es "absolutamente inocente" y su entonces adjunto Daniel Ponce y la funcionaria Regla Pereira han afirmado que son inocentes.
Rivas, último que ha tomado la palabra en este trámite, ha afirmado: "Soy totalmente inocente, como vengo manifestando desde el primer día".
El juicio ha comenzado con la lectura por el secretario de los escritos de acusación, entre ellos la fiscalía, que solicita 21 meses de suspensión y 900.000 euros de multa.