El incendio que avanza sin control por la comarca valenciana de Los Serranos acaba de obligar al desalojo del pueblo de Bugarra, situado entre los pueblos de Chulilla, Gestalgar y Pedralba, lo que eleva el número de evacuados a unas 2.000 personas, según el Centro de Coordinación de Emergencias.
Los municipios afectados por este incendio, declarado este domingo y con cuatro frentes incontrolados, son ya seis: Chulilla, Gestalgar, Pedralba, Bugarra, Casinos y Sot de Chera.
En la zona afectada, situada a unos 50 kilómetros al noroeste de la ciudad de Valencia, trabajan ya 31 medios aéreos, seis menos que los previstos inicialmente para esta mañana.
Asimismo, el número de efectivos terrestres que intenta controlar y extinguir las llamas asciende a 600, entre bomberos, miembros de la UME, personal sanitario y agentes de las Fuerzas de Seguridad del Estado.
La Unidad Militar de Emergencias (UME) ha puesto a disposición de la Generalitat Valenciana 355 efectivos y tiene previsto enviar en las próximas horas otros 200 para colaborar en las labores de extinción del incendio declarado en las proximidades de la localidad de Chulilla, en Valencia.
Las fuertes rachas de poniente dificultan el control del incendio
Las fuertes rachas de viento de poniente que azotan desde este domingo la comarca valenciana de Los Serranos están dificultando las labores de extinción del incendio forestal.
Así lo ha explicado ante los medios el conseller de Gobernación, Serafín Castellano, desde el puesto de mando avanzado instalado en la zona más afectada por este incendio.
Hasta el momento no hay constancia de viviendas afectadas por las llamas pero sí de al menos una nave que almacenaba madera.
Los responsables del dispositivo de emergencia confían en que durante el día de hoy amaine la intensidad del viento y cambie su dirección a componente norte, así como que la temperatura no sea tan "infernal" como la registrada ayer y haya más humedad.
Desalojan a unas 70 personas de un colegio por el incendio de Ribarroja
El incendio declarado a primeras horas de esta tarde en el término municipal de Ribarroja, a unos 15 kilómetros de Valencia, ha obligado a desalojar preventivamente a unas setenta personas (entre alumnos y profesores) de un colegio y a los habitantes de varias viviendas de la zonas próximas al fuego.
Fuentes del Centro de Coordinación de Emergencias han informado también que se han movilizado dos medios aéreos más, que se suman al enviado a la zona en un primer momento.
Los bomberos han logrado cortar el paso del fuego a las puertas del colegio y tratan de impedir el avance de las llamas por una zona forestal, según han señalado fuentes del Consorcio Provincial.
En declaraciones a EFE, la directora del Colegio María de Iciar, Estíbaliz Vilar Rey, ha manifestado que se ha desalojado a 20 niños y unos 50 adultos, entre personal docente, administrativo y de servicios.
Ha añadido que la policía y bomberos han actuado con rapidez, por lo que la evacuación se ha realizado con tranquilidad y con carácter preventivo, sobre todo por el abundante humo existente.
En el colegio, de titularidad privada, hay matriculados unos 150 alumnos, aunque en el momento del desalojo sólo habían 20, ya que era la hora de la comida y el resto acuden a sus casas, la mayoría en las urbanizaciones próximas.
La zona que más peligro ha corrido es la granja escuela, situada en la ladera de una colina, aunque se ha logrado trasladar a tiempo a los animales a otras dependencias, según Vilar Rey.
Según fuentes del Consorcio provincial de Bomberos, el fuego sigue activo en una zona forestal y en su extinción intervienen unidades de Paterna, L'Eliana y Torrent, así como tres brigadas, tres autobombas y dos brigada de la diputación de Valencia.