El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, ha cuestionado el compromiso del lehendakari Patxi López de no pactar con Bildu tras las elecciones vascas del 21 de octubre y se ha referido a la "experiencia acumulada" de los anteriores comicios cuando también aseguró que no pactaría con el PP y lo hizo.
Mientras, el vicesecretario general de comunicación del PP, Esteban González Pons, ha asegurado que el "riesgo es que PNV y Bildu hagan un frente" en el que antepongan las cuestiones políticas a las de la economía.
El candidato del PNV a la Lehendakaritza, Iñigo Urkullu, en una entrevista en la Cadena Ser a la que cita Efe, no ha querido pronunciarse sobre gobiernos de coalición y ha señalado que "más allá de resultados aritméticos" lo prioritario para el PNV es trabajar para salir de la crisis económica, normalizar la convivencia política en la sociedad vasca y el desarrollo del autogobierno.
Sobre estos asuntos, Urkullu ha asegurado que el PNV exigirá consensos y coordinación interinstitucional y esa es, ha dicho, "la esperanza del partido, poder alcanzar esos consensos".
A la pregunta de si estaría dispuesto, como ha dicho el director del Euskobarómetro, a gobernar pactando los presupuestos con el PP y los temas soberanistas con Bildu, Urkullu se ha limitado a decir que esa es sólo "una opinión" y ha comentado que "de aquí a las elecciones, el PNV va a recibir muchas lecciones".
Urkullu también ha subrayado la poca comunicación que tiene con el lehendakari y ha dicho que "hablar, hablar de lo nuestro" no lo hace desde el mes de abril, cuando mantuvo una conversación telefónica. Desde entonces no ha habido contactos y "no por falta de voluntad", ha remarcado.
Pasos "cuestionables" sobre el voto de desplazados
También ha calificado de "retroceso" estar "temerosos" de la presencia de Bildu o de la izquierda abertzale en las instituciones máxime cuando ETA ya ha anunciado el cese de la violencia terrorista.
Sobre este asunto, el presidente del PNV ha asegurado que el PSE-EE se ha aprovechado electoralmente del "liquidacionismo que ha practicado la organización terrorista".
En este ámbito, Urkullu ha defendido la actuación del Gobierno de Mariano Rajoy pero ha considerado también que puede "dar más pasos de los que viene dando" y ha considerado que en política penitenciaria sólo se han dado "pequeños pasitos".
En este contexto, ha citado como "pasos cuestionables" los referidos al voto de los desplazados y exiliados del País Vasco y ha lamentado el hecho de que se plantee cuando no se puede poner en práctica en las autonómicas de octubre.
A la pregunta de si creía que faltaba Arnaldo Otegi en la campaña, Urkullu ha señalado que el exportavoz de Batasuna "no debería estar encarcelado", si bien ha recordado que fue la propia candidata de Bildu la que ha dicho que "Otegi no debería ser el candidato".
El PP jugará un papel "moderado"
Por su parte, el vicesecretario general de comunicación del Partido Popular, Esteban González Pons, ha señalado que su partido jugará un papel "moderado" en las próximas elecciones vascas.
Para González Pons, en el País Vasco "el riesgo es que PNV y Bildu en los sectores nacionalistas hagan un frente en el que antepongan las cuestiones de los políticos a las de la economía a los problemas de los vascos".
También se ha referido a anteriores gobiernos del PNV y ha señalado que "no hay una vuelta a un escenario viejo", porque "del escenario entre Basagoiti y Patxi López", se puede pasar "a la política de Ibarretxe", cuando se "necesita a Basagoiti y al mejor López que se negó al apoyo del PP".
El Gobierno Vasco, "estupefacto" por la propuesta de reforma fiscal de Urkullu
El Gobierno Vasco se ha mostrado "estupefacto" por que el presidente del PNV, Íñigo Urkullu, propusiera ayer una reforma fiscal cuando se ha estado oponiendo "de forma contumaz" a las propuestas realizadas en este sentido por el actual Ejecutivo autonómico y que "ha bloqueado por todos los medios".
La Presidencia del Ejecutivo que preside Patxi López se ha referido, en un comunicado, a las manifestaciones de ayer de Urkullu en las que apostaba por una "reforma tributaria" basada en la "progresividad, la equidad y la justicia social".
A juicio del Gobierno Vasco, las declaraciones de Urkullu indican, "lamentablemente, que el paso por la oposición no ha corregido la concepción patrimonialista que el PNV tiene de las instituciones de Euskadi, ni tampoco su tendencia a supeditar los intereses generales de la ciudadanía a los suyos propios".
"Que el candidato del PNV llame a recuperar el 'tiempo perdido', cuando durante más de dos años ha bloqueado una reforma esencial para dotar a Euskadi de recursos para luchar mejor contra los efectos de la crisis, es una broma que este Gobierno no puede tolerar", ha añadido.
Ha recordado que en los últimos años el PNV "ha negado cualquier legitimidad al Gobierno para plantear una reforma acordada del sistema tributario", así como la necesidad de proceder a la revisión del modelo fiscal para conseguir que "paguen impuestos quienes se escapan de pagar ahora y paguen todo lo que les corresponde".
El Gobierno socialista ha denunciado que Urkullu ha utilizado en los últimos tiempos expresiones como "ocurrencia" para referirse a sus propuestas para hacer el sistema fiscal "más justo y eficiente". Afirma que "sólo la expectativa de recuperar el poder perdido" explica que el PNV "haya pasado de negar la conveniencia de una reforma fiscal a ponerse enfrente de ella".