Los precios de los alimentos en los mercados mundiales se dispararon un 6% en julio en comparación al mes anterior, debido sobre todo al fuerte encarecimiento de los precios de los cereales y el azúcar, ha informado este jueves la FAO, la organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura. Se rompe así la tendencia bajista de los últimos tres meses.
El índice de la FAO sobre los precios alimentarios se sitúa así en 213 puntos, 12 por encima del indicador de junio, pero aún lejos del récord de 238 puntos que se alcanzó en febrero de 2011, ha recordado el organismo internacional en un comunicado.
Así, la FAO alerta del riesgo de que se produzca una nueva escalada de los precios de los alimentos, similar a la registrada entre 2007 y 2008, cuando las fuertes subidas de productos básicos como los cereales provocaron violentas protestas en muchos países.
"Hay un riesgo potencial de que los precios suban más", ha advertido a Reuters la economista y especialista en cereales de la FAO, Abdolreza Abbasian, quien indica que habrá una reedición de la crisis alimentaria de 2008 si los países comienzan a introducir políticas proteccionistas.
El maíz sube un 23% y el trigo, un 19%
Según el comunicado de la FAO, los precios de los cereales alcanzaron los 260 puntos en julio, un 17% más que el año anterior, porque subieron un 23% los precios del maíz debido a la sequía en Estados Unidos. Esa circunstancia causó también el encarecimiento del precio del trigo un 19%, al estar más demandado por los ganaderos por la falta de maíz y al no alcanzar Rusia el volumen de producción estimado inicialmente.
En cuanto al arroz, un producto esencial para la alimentación humana en el planeta, el precio se mantuvo el mes pasado más o menos estable, ya que solo se incrementó en una décima respecto a junio. Esto podría cambiar, advierte el informe de la FAO, en los próximos meses, ya que deberá revisarse a la baja la producción mundial de arroz después de que las lluvias del monzón hayan sido menos abundantes en India, uno de los mayores productores de ese grano.
Los precios del azúcar se incrementaron un 12% debido a las lluvias a destiempo en Brasil, que dificultaron la recolección del azúcar de caña en el que es el mayor exportador mundial de azúcar, y también se elevaron en menor medida por el retraso del monzón en India y las escasas precipitaciones en Australia, explica la FAO.
Por el contrario, por tercer mes consecutivo cayó el índice FAO relativo a la carne, que descendió en el pasado julio un 1,7% respecto al mes precedente. La debilidad de la demanda mundial se ha notado en los cuatro tipos de carne, pero sobre todo, en la de cerdo, donde los precios han caído un 3,6%. El resto de las carnes (bovino, ovino y ave) se abarataron un 1%.
La FAO también indicó que los productos lácteos mantienen sus precios al nivel de junio, después de cinco meses consecutivos de descensos. Solo se ha registrado un encarecimiento de la leche en polvo, mientras que la mantequilla y la leche desnatada en polvo han seguido bajando.