Primer día del levantamiento de la acampada Sol. Tras numerosas asambleas los ciudadanos han decidido desmantelar, aunque no totalmente, lo que desde el 15 de mayo ha sido un lugar de debate, un espacio de unión para miles de personas que buscan un cambio real, un punto de encuentro donde intercambiar ideas y proponer alternativas para un sistema que dicen "no les representa".
En el centro de la plaza se encuentra un punto de información permanente, un espacio construido con palés donde distintos voluntarios responden a las preguntas que muchos ciudadanos plantean: dónde tendrán lugar las próximas asambleas, qué pasará a partir de ahora con el Movimiento o cuáles son las actividades o acciones programadas.
Pablo llega al mediodía, viene a relevar a sus compañeros. Es ingeniero, colaborador de Amnistía Internacional y trabaja en Moldavia. Decidió venir a Madrid para prestar su solidaridad y apoyo a todos los acampados. "Sentía indignación por los políticos y banqueros. Las imágenes que vi me dieron fuerza para regresar, pedí permiso a mi jefe y así lo hice. Soy un ciudadano del mundo que busca bienestar social. Ahora vivo aquí, en la calle. No quiero nada para mí, sino para el pueblo".
En el mostrador central hay una caja donde se lee: “Haz tu propuesta”. Un grupo de personas escriben sus ideas, que posteriormente se leerán y recopilarán, “quizá deriven en acciones concretas o en algún tipo de movilización”, explica José Luis que, como Pablo, está de voluntario informando a muchos curiosos que por allí se acercan. “Han comenzado los tiempos de la libre expresión”, dice emocionado, “esta iniciativa quiere escuchar a los ciudadanos porque todos tenemos algo que decir”.
Los que se quedan
La decisión de irse o quedarse no ha sido fácil, cuenta José Luis a RTVE.es. “Yo no soy partidario del levantamiento, creo que aquí vinimos para ver cambios en el sistema y éstos aún no se han producido”. “Lo que es indudable, eso sí, es que continuamos con el mismo espíritu del principio: seguimos indignados, seguimos pensando que hay que remover políticas y conciencias. Por eso surgen manifestaciones espontáneas como la de anoche, donde más de mil personas recorrimos las principales calles de la ciudad”.
En la Puerta del Sol todavía permanecen algunas de las más de 40 comisiones que se han creado, como la de alimentación. Unai, de 22 años, integra esta última y reconoce que ya ha perdido la cuenta de los días que lleva durmiendo en la plaza, "más de 20 seguro". “Lo más bonito de todo son los lazos humanos que se han creado, ya somos como hermanos”. Su comisión probablemente levante hoy la acampada.
También se queda la comisión de infraestructuras, seguirán para ayudar en lo que sea necesario. “Ayer limpiamos durante doce horas, quitamos todos los carteles, que se han guardado para el archivo, debemos ser ejemplo de cooperación y civismo”.
En lo que todos coinciden es que ayer se vivieron momentos de alegría y de tristeza. Patricia, de la comisión de música (también llamada "Sol sostenido"), recuerda que uno de los más emotivos fue el desmantelamiento de la biblioteca, donde había 4.000 libros cedidos por los ciudadanos. Ahora se han trasladado al Centro Social Casa Blanca. En su grupo de trabajo ya están grabando las canciones que una decena de músicos ha compuesto sobre el movimiento.
El fin del principio
“Se ha cerrado un capítulo”, señala Patricia, “pero ésto es sólo el comienzo de algo que aún es impredecible. Hemos sido capaces de organizarnos por nosotros mismos, de hablar de cosas realmente importantes, de constituirnos en comisiones, de trabajar de manera horizontal. Pensábamos que no iba a ocurrir y ha pasado”.
“El 15M sigue, vamos a continuar trabajando“
En una boca del metro, antes empapelada por mensajes y deseos de unos ciudadanos indignados y con ganas de cambio, se lee: “Nos vemos en los barrios”. "Sol no es el centro del mundo, esto sigue, vamos a continuar trabajando", explica Pedro, de la comisión de comunicación. "Hemos conseguido retomar los espacios públicos para poder reivindicarnos y expresarnos en voz alta, hemos hecho resurgir las conciencias".
El próximo domingo, 19 de junio, tendrá lugar una manifestación que hasta ahora está convocada en más de 80 localidades españolas. En Madrid la organiza la Coordinadora de Trabajadores de Pueblos y Barrios en lucha, y se ha adherido Democracia Real Ya (DRY). Jon Aguirre, uno de los portavoces de DRY, afirma que esperan superar la participación del 15M porque el caldo de cultivo generado es muy importante y el descontento persiste.
El Movimiento 15M sigue presente en Sol, aunque se haya levantado la acampada. A los pies de la estatua de Carlos III hay una placa con unas palabras grabadas: "Dormíamos, despertamos". Dicen que, si la situación no mejora, "ya saben el camino de vuelta".