El Ayuntamiento de Madrid reducirá finalmente su número de coches oficiales y de escoltas para sus cargos electos siempre que el Ministerio del Interior, al que comunicará esta decisión, no vea problemas de seguridad en esta medida.
Así lo han decidido los cuatro grupos municipales -PP, PSOE, IU y UPyD- en una reunión previa a la constitución de la nueva corporación el próximo día 11, en la que también se ha acordado poner a disposición de la nueva formación en el Ayuntamiento, el partido de Rosa Díez, una de las tres plantas que tienen ahora los socialistas en el edificio de la calle Mayor 71 y un número similar de asesores técnicos al que hasta ahora tenía Izquierda Unida.
Mientras el acuerdo sobre los coches oficiales, a los que de todas formas renunciarán los cinco concejales de UPyD, parece seguro, no parece posible que el consenso se extienda a la nueva propuesta de esta formación, la rebaja del 10% del sueldo de los concejales, que propondrá en cuanto se inicie la legislatura, a tenor de las declaraciones de los representantes del PP, el PSOE e IU tras la reunión de este viernes.
En cuanto a los coches, la solución alcanzada reducirá su número a uno para el alcalde y para cada uno de los cuatro portavoces de los grupos y otro por cada área de gobierno y cada distrito, más cinco para el Grupo Socialista, dos para el de IU y uno para el de UPyD, lo que podría sumar, en función cuál sea la futura estructura del Ayuntamiento, alrededor de una treintena, es decir, en torno a la mitad de los actuales.
El Grupo Popular, como tal, no dispondrá de coches porque la mayoría de sus concejales tendrá puestos de responsabilidad, y por tanto vehículo, en áreas de gobierno y distritos.