La Sección Primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha condenado a 22 años de cárcel al etarra Arkaitz Goikoetxea por ser el responsable del "comando Vizcaya" desarticulado en julio de 2008, pero ha decidido absolverle por su presunta responsabilidad en los planes para secuestrar y asesinar al concejal del PSE de Eibar Benjamín Atutxa, en una acción que pretendía emular el rapto que acabó con la vida de Miguel Angel Blanco.
El tribunal de la Audiencia Nacional, presidido por Manuela Fernández Prado, ha encontrado a Goikoetxea culpable de los delitos de pertenencia a organización terrorista, tenencia de explosivos, tenencia de armas y falsificación continuada en documento oficial.
Los magistrados han decidido en cambio absolver a Goikoetxea de los delitos de tentativa de detención ilegal, asesinato y conspiración de los se le acusaba.
Los jueces han condenado asimismo a 16 años de cárcel a Asier Cotano y a 14 años de prisión a Íñigo Gutiérrez, los dos miembros del comando que actuaban a las órdenes de Goikoetxea.
Se han impuesto por último penas de siete años de cárcel a Maialen Zuazo y de cinco años a Ana Isabel Prieto por colaborar -prestar alojamiento, realizar transportes- con el grupo terrorista.
La Sección Primera de lo Penal ha absuelto además a Adur Aristegui y a Gaizka Jarreño, a los que se acusaba de colaborar con el comando. "No se ha probado que Adur Aristegui y Gaizka Jareño realizasen labores de apoyo o colaborasen", señala la sentencia hecha pública este viernes.
Secuestros y asesinatos
A pesar de absolverles del delito de tentativa de secuestro y asesinato, la sentencia considera probado que el comando, entre los años 2007 y 2008, elaboró planes para secuestrar y asesinar al concejal del PSE en Eibar (Vizcaya) Benjamín Atutxa.
Txeroki facilitó en septiembre de 2007 al comando información sobre el concejal del PSE en Eibar Benjamín Atutxa, quien fue vigilado por Goikoetxea y Martitegi, entre octubre de 2007 y abril de 2008, vigilaron en numerosas ocasiones al concejal y llegaron a preparar en un "zulo" situado en Pazuengos (La Rioja) varias jeringuillas con tranquilizantes para sedar a Atutxa.
La sentencia también considera probado que el comando liderado por Goikoetxea llegó a recabar la información necesaria para llevar cabo un atentado contra el juez Fernando Grande-Marlaska en la vivienda que el magistrado tiene en la localidad riojana de Ezcaray.