Una de las dos crías de lince nacidas el pasado viernes en el Zoobotánico de Jerez de la Frontera (Cádiz) ha fallecido en la madrugada de este lunes sin que se hayan podido determinar las causas de su muerte.
La otra cría se encuentra, hasta el momento, en perfecto estado de salud, aunque los veterinarios y el personal del recinto andaluz han extremado las precauciones.
Los dos cachorros evolucionaban "con normalidad" desde que fueron abandonadas por su madre, una hembra de lince ibérico llamada Artemisa, de 7 años y que forma parte del Programa de Cría en Cautivida de esta especie, el felino más amenazado del planeta.
Sin embargo, la pasada madrugada, cuando les tocaba una de las tomas de biberón, uno de los cachorros se mostró "apático y sin fuerzas". Y aunque el veterinario del centro intentó reanimarlo, falleció poco después.
Hasta el momento se desconoce la causa de la muerte, por lo que el cuerpo será enviado el Centro de Análisis y Diagnóstico de la Junta de Andalucía para que se le practique la necropsia con el fin de determinar los motivos del fallecimiento.
Esta es la segunda camada de lince ibérico nacida en el Zoobotánico de Jerez -aunque de la primera no sobrevivió ninguna cría- donde además se han criado varios cachorros procedentes de Doñana y Sierra Morena, las dos únicas poblaciones silvestres de estos felinos.
El lince ibérico se ha reproducido en cautividad hasta la fecha exclusivamente en centros que forman parte del Programa de Conservación Ex-situ de la especie: El Acebuche en Doñana, La Olivilla en Santa Elena (Jaén), Silves en el Algarve portugués y el Zoobotánico de Jerez.