Las autoridades de Tailandia han elevado este viernes a 25 los fallecidos por las graves inundaciones que sufre desde el pasado fin de semana la región sur del país, donde miles de turistas fueron evacuados por los militares. Además, habría también más de 180 heridos.
Ocho provincias del sur de país, muchas de las cuales viven del turismo, han quedado sumergidas y aproximadamente un millón de personas se han visto afectadas por las lluvias inusualmente intensas en esta estación. Aldeas enteras han sido engullidas por el agua, que llega a un metro de altura en varios distritos.
Las televisiones tailandesas han transmitido imágenes de las aguas fangosas que sumergen pueblos enteros hasta las copas de los árboles y que han destruido puentes y han aislado a decenas de aldeas.
El viceprimer ministro, Suthep Thaugsuban, ha indicado que el desastre había sorprendido a los habitantes. "Estoy muy preocupado por ellos, porque muchas carreteras están cortadas y miles de tierras de cultivo han sido inundadas", ha señalado.
Unas 9.000 personas evacuadas
Alrededor de 9.000 personas han sido evacuadas, entre las que hay un millar de turistas que quedaron varados en las islas en el Golfo de Tailandia y el Mar de Andamá, por los buques del ejército en los dos últimos días.
Con la mejora gradual de la situación, la isla de Koh Samui ha retomado las comunicaciones por avión y barco y el Ejército ha empezado a reducir el número de operaciones de socorro. Pero el parque nacional de Similan, conocido por sus hermosos corales, continúa cerrado.
Las fuertes precipitaciones comenzaron hace una semana y ocurren en la que debería ser la estación más seca y calurosa del año en Tailandia.
Las devastadoras inundaciones a finales del año pasado dejaron 220 muertos, provocando daños en casas y dejando sin medios de subsistencia a aunos 8,3 millones de personas de 51 de 76 provicias del país.