Las autoridades de Baréin han detenido a varias personas de la oposición por ponerse en contacto con países extranjeros e incitar al asesinato y la destrucción de la propiedad, según la televisión estatal. Por otro lado, continúan las denuncias de la comunidad internacional que condenan la violenta represión.
En un comunicado se asegura que los detenidos, de los que no se han facilitado los nombres ni cuántos son, son "líderes de los disturbios civiles" que se han "comunicado con países extranjeros y han incitado a matar a ciudadanos y a destruir la propiedad pública y privada".
Por su parte, el grupo de la oposición Wefaq afirma que son seis los líderes de la oposición detenidos este jueves en las últimas horas, como parte de las operaciones de las fuerzas de seguridad para acallar las protestas que estallaron en este país el pasado 14 de febrero.
Y mientras tanto, la alta comisionada de la ONU para los derechos humanos, Navi Pillay, ha denunciado la violenta represión de las protesta políticas en Baréin y las trabas que las fuerzas de seguridad han puesto para salvar la vida de civiles heridos.
Los detenidos
Fuentes de la oposición han confirmado que entre los detenidos se encuentran Ibrahim Sharif, suní, secretario general del partido izquierdista Waad, el segundo más importante de la oposición, y Hasan Meshaina, secretario general del movimiento chií Haaq. De momento se desconoce el paradero de Sharif.
El partido Waad ha condenado esta medida "opresora", que según ese partido, tiene el objetivo de acallar a la gente e impedir la revelación de "las prácticas opresoras del régimen".
También han sido arrestados Abduljalil al Singace, portavoz del partido Haaq; Abdulawahab Husein, portavoz del movimiento Wafa, y Abdulhadi al Mogodaer, militante de ese último partido político.
Los grupos a los que pertenecen son los que más presión política están ejerciendo en favor de reformas en este pequeño reino del golfo Pérsico.
Uno de los detenidos, Meshaina, se vio beneficiado por una amnistía política al regresar a Baréin a finales del mes pasado después de pasar varios meses en Londres siguiendo un tratamiento médico. Existía sobre él una orden de detención dictada por la Interpol por supuestas actividades terroristas, pero los cargos quedaron en suspenso a partir del perdón otorgado por el rey de Baréin, Hamad bin Isa al Jalifa.
Los mismos cargos de supuestas actividades terroristas afectaban también a Al Singace, quien fue liberado a fines de febrero como parte del perdón real que benefició a centenares de presos políticos, y Al Mogodaer.
Existen versiones no confirmadas sobre la posibilidad de que también haya sido detenido Ali Salman, dirigente del principal partido de la oposición bareiní, Al Wefaq, así como otros militantes de base de la oposición.
La ONU denuncia la violenta represión
Por otro lado, la alta comisionada de la ONU para los derechos humanos ha revelado que cuenta con informaciones sobre asesinatos, detenciones arbitrarias y palizas de manifestantes y personal médico, además de la toma de control de varios hospitales por parte de diversas fuerzas de seguridad, particularmente la policía, el ejército y las del Consejo de Cooperación del Golfo.
La actuación de estas tropas contra servicios y personal médico ha sido calificado por Pillay como una "violación escandalosa y flagrante del derecho internacional".
Concretamente, esas fuerzas armadas atacaron personal médico e impedido toda entrada o salida del principal hospital de Manama, al que además se le ha cortado la electricidad de la que depende la vida de pacientes graves. A esto se agrega la obstrucción del paso de ambulancias transportando heridos de las manifestaciones.
Pillay ha advertido a los integrantes de las fuerzas de seguridad que cometen tales acciones que sus actos serán juzgados según las leyes internacionales, incluso si son el resultado de órdenes superiores.
Asimismo, la alta comisionada ha asegurado que es preocupante la declaración del estado de emergencia por tres meses en Baréin y ha recordado a sus autoridades que ningún derecho fundamental puede ser derogado ni siquiera en tal contexto.
Se reduce el toque de queda
Por otro lado, se ha reducido el toque de queda establecido el miércoles en la capital, Manama, en cuatro horas, ha anunciado un portavoz del Ejército a la televisión estatal.
El toque de queda entre el distrito financiero y el puente de Sheik Isa bin Salman al Khalifa regirá entre las 20.00 y las 4.00 horas. El miércoles Baréin también prohibió las manifestaciones e impuso un toque de queda entre las 16.00 y las 4.00 horas en todo Manama.