Unas 70 personas han muerto y más de 100 han resultado heridas en dos ataques terroristas contra mezquitas en el noroeste de Pakistán en el momento del rezo matutino y vespertino de la tradicional oración del viernes.
En el más grave de ellos han fallecido 66 personas y otras 80 han resultado heridas tras desplomarse una mezquita al final de la oración matutina en un atentado suicida en localidad paquistaní de Darra Adam Khel, según han informado fuentes oficiales.
El ataque se ha producido en torno a las diez de la mañana (hora española), cuando unos 300 fieles se habían congregado en el lugar, según ha precisado un miembro de las fuerzas de seguridad.
El techo del templo se derrumbó debido a la explosión, y varias personas quedaron atrapadas entre los escombros.
"Ahora el balance de muertos es 66 y podría aumentar más porque varios heridos están en situación crítica", ha declarado Shahid Ullah, un alto cargo del Gobierno privncial.
Alrededor de 300 personas se habían reunido tras las oraciones cuando el terrorista entró en la sala principal de la mezquita Waali y se detonó a sí mismo, según testigos.
"Acababa de finalizar mis oraciones cuandoe scuché una gran explosión. Fue muy aterrador, no sé qué ocurrió luego, solo que me caí", ha declarado Mohib Ullah, un chico de quince años que estaba en la mezquita.
La localidad, de unos 50.000 habitantes, está situada a unos 50 kilómetros de la principal ciudad del noroeste paquistaní, Peshawar, capital de la conflictiva provincia de Khyber-Pakhtunkhwa.
Ataque en Peshawar
Precisamente en las afueras de Peshawar se ha producido el segudo ataque, donde al menos 3 personas han muerto y 24 resultaron heridas en un ataque insurgente.
El ataque ha tenido lugar en torno a las 19.30 horas locales (15: 30 hora española) en la zona de Badaber, un suburbio de la capital de la provincia de Khyber-Pakhtunkhwa.
Un grupo compuesto por varios insurgentes lanzó al menos tres granadas de mano contra el templo cuando en él se encontraban congregados cerca de un centenar de fieles para el rezo vespertino, de acuerdo con la versión policial.
Las fuerzas de seguridad acordonaron el lugar atacado y los heridos fueron trasladados a hospitales cercanos, informaron los medios paquistaníes.
Los atentados contra lugares de culto, considerados objetivos fáciles por no disponer de grandes dispositivos de seguridad, se han convertido en algo habitual en el país durante los últimos meses.
De hecho, más de 12.000 personas han muerto en el año 2009 por sucesos violentos en el país surasiático, un cuarto de ellas en ataques terroristas, según un informe del Instituto de Pakistán para Estudios de Paz.