"Pido a la Unión Europea que no levante la "posicñon común" porque el gobierno cubano no ha hecho nada para demostrar que algo haya mejorado. Sólo ha sacado a algunos presos y ha dejado a otros en el país, sin libertad y súper vigilados". Éstas han sido las palabras a Radio Nacional del disidente cubano, Guillermo Fariñas tras recibir el premio Sájarov 2010.
De este modo se ha referido a la próxima reunión que tendrá lugar el lunes entre los ministros de Exteriores de los Veintisiete y Cuba para analizar las relaciones con la UE. Pero, más allá de las reivindicaciones también ha agradecido el galardón de una forma muy especial ya que se lo ha dedicado al fallecido Orlando Zapata.
Tres premios para la disidencia
"Pienso que el premio le ha sido entregado a todo el pueblo cubano y fundamentalmente a la disidencia interna que lucha por una democracia verdaderamente representativa. Además, es un hito para Cuba que nuestra lucha tenga ya tres premios y recibiremos muchos más hasta que el gobierno no democratice la isla", ha declarado Fariñas.
El disidente también ha reiterado, como hicieron otros compatriotas, que la lucha "no debe terminar" ya que "en cualquier momento podemos tener muchos presos políticos más".
Pero, volviendo al premio, le ha dedicado la distinción a Orlando Zapata, a los "mártires" por la democracia y al pueblo cubano.
Todo ello, dentro de un sentimiento de "tristeza" con el que ha asegurado que recibe el galardón porque para llegar a este momento tuvo que morir Zapata y "ocurrieron cosas muy feas entre cubanos".
El psicólogo y periodista independiente de 48 años, que este año protagonizó una huelga de hambre de más de cuatro meses tras la muerte de Zapata, considera que la concesión del Sájarov supone un nuevo reconocimiento a la disidencia interna, al exilio cubano y a los presos políticos que todavía están en prisión.
También ha agradecido que los demócratas europeos sigan teniendo presente y no olviden la lucha de estos colectivos por las libertades en Cuba.