La segunda perforadora que trabaja en la excavación de un túnel para rescatar a 33 mineros atrapados a 700 metros de profundidad en el norte de Chile, que forma parte del llamado "Plan B", ha superado los 100 metros tan solo dos días después de empezar a cavar, según ha informado este martes el ingeniero Miguel Fort.
La maquina T-130 "superó la profundidad alcanzada por la (maquina) Strata", que el lunes había superado los 100 metros, ha comunicado el ingeniero a periodistas.
Fort también ha aclarado que no es ninguna sorpresa: "esto es algo que ya estaba programado", porque la T-130 "trabaja sobre una perforación ya realizada".
Iniciativas durante la espera
Los 33 mineros, 32 chilenos y un boliviano, fueron sepultados por un derrumbe el 5 de agosto en la mina San José, que queda 800 km al norte de Santiago, en el desierto de Atacama.
Tres máquinas perforadoras, dos de ellas ya operando, trabajarán en tres planes independientes para rescatar a los mineros, conocidos como "plan A", "B" y "C". La estimación de las autoridades es que los mineros estarán fuera antes de Navidad.
Mientras, desde el exterior se intenta que todos soporten la espera de la mejor forma posible. En los últimos días se lograba que comieran comida caliente, se les realizaba unos alentadores estudios médicos según los cuales se les veía de mejor ánimo y, algo que hasta ahora resultaba complicado, se pudo establecer una videoconferencia con ellos, algo que, sin duda, ha elevado el ánimo tanto de los atrapados como el de sus familiares.
Preparación para la vuelta al exterior
Por otro lado, aunque las actividades actuales se centren en la liberación de los mineros, también hay que pensar en cómo actuar después. Así lo cree la NASA, que ha recomendado tanto a las autoridades como a las familias de los mineros atrapados que les preparen para su reintegración en la vida social cuando sean rescatados y adquieran "cierto estatus de celebridad".
La NASA, que acumula décadas de experiencia en misiones prolongadas de astronautas encerrados en espacios pequeños y sitios remotos, ha enviado a varios expertos a Chile para ayudar en las labores de rescate y atención a los 33 minero.
Michael Duncan, subjefe de servicios médicos de la NASA, ha asegurado que, por un lado, "están las labores que se hacen ahora para darles alimento, apoyo psicológico, y las tareas de excavación".
"Pero también está el después, el reintegro a la familia y a la sociedad", ha añadido el experto, quien también ha señalado que después de que salgan de la mina en la que están atrapados, "los mineros tendrán cierto estatus de celebridad, habrá presiones de la sociedad, de los medios, otras personas que querrán parte de su tiempo".