Un equipo de la NASA que ha visitado a los 33 mineros atrapados en una mina en el norte de Chile a 700 metros de profundidad ha recomendado dividir el espacio en diferentes zonas reguladas por luces que ayuden a diferenciar el día de la noche, además de un programa de ejercicios físicos.
Los mineros ya han batido un record de supervivencia bajo tierra: llevan atrapados en un túnel bajo tierra casi un mes. Por delante deben hacer frente a entre dos y cuatro meses de aislamiento.
"Aconsejamos que haya una zona común que siempre esté iluminada, una segunda zona que siempre esté oscura para dormir, y un tercer espacio, el de trabajo, donde realicen las labores mineras. Al cambiarse de áreas a través de estas ubicaciones geográficas dentro de la mina se puede regular el ciclo de luz, y diferenciar la noche y el día", explicó un psicólogo de la NASA.
Aunque los mineros perdieron alrededor de 10 kg cada uno durante los primeros 17 días antes de que fueran encontrados con vida, los funcionarios aseguran que están en muy buen estado de salud.
No les faltan alimentos, medicinas, y las cartas de los familiares que les llegan cada día a través de una sonda.
Hacer ejercicio es otra de las recomendaciones que ayudará a mantener la salud de los mineros, a los que se les ha pedido que trabajen también retirando los escombros de roca que caen durante la perforación.
Aunque las autoridades locales inicialmente explicaron que hasta la Navidad no podrían culminar el recate, el ministro de Salud, Jaime Manalich, ha apuntado que podrían conseguirlo a finales de noviembre.
Los equipos de rescate han perforado 41 metros hasta la fecha, alrededor de un 5% de la distancia al objetivo, y están buscando otras opciones para tratar de conseguir avanzar más rápido.