La Reserva Federal de Estados Unidos (FED) ha decidido este martes retomar algunas medidas para estimular la actividad económica y reactivar la recuperación en el país, que empieza a dar señales de agotamiento. Así, la entidad emisora ha anunciado que usará dinero de sus inversiones en hipotecas para comprar bonos del Tesoro.
"El Comité mantendrá constante su cartera de títulos al nivel actual, mediante la reinversión de los réditos de sus inversiones en deuda de agencias y titulizaciones hipotecarias de agencias en bonos del Tesoro a largo plazo, para respaldar la recuperación de la economía en un contexto de estabilidad de precios", precisa el comunicado emitido por la FED.
Tipos bajos durante mucho tiempo
Tras el anuncio de la Reserva Federal, la Bolsa de Nueva York ha empezado a remontar las pérdidas que han marcado sus últimas sesiones. A dos horas del cierre, el principal índice neoyorquino, el Dow Jones de Industriales ha recortado a menos de 30 puntos la caída que pocos minutos antes del comunicado eran superiores a los 100 puntos. Al final, el índice ha retrocedido un 0,51% al cierre de la sesión.
Al término de su reunión, el órgano que dirige la política monetaria estadounidense, el Comité de Mercado Abierto, también ha reiterado que mantendrá durante "un amplio período" los bajos tipos de interés (por debajo del 0,25%) que ha aplicado desde diciembre de 2008.
Esa decisión ha contado con el voto favorable de nueve de sus miembros, incluído el presidente Bernanke, pero ha recibido el voto contrario de Thomas M. Hoenig, quien no considera apropiado garantizar ese nivel tan bajo en el precio del dinero durante mucho tiempo.
Crecimiento ralentizado
"Los datos recibidos desde la anterior reunión de junio indican que el ritmo de la recuperación del PIB y del empleo se ha ralentizado en los últimos meses", explica el banco central estadounidense en su comunicado, en el que pronostica que las condiciones económicas probablemente garantizarán el mantenimiento por un "período prolongado de los niveles excepcionalmente bajos de los tipos federales".
Así, la entidad presidida por Ben Bernanke precisa que los últimos datos constatan un gradual incremento del gasto de los consumidores que, sin embargo, se mantiene limitado por el elevado desempleo, la modestia del aumento de los ingresos, la menor riqueza inmobiliaria y las restricciones crediticias.
Por su parte, el gasto de las empresas en equipamiento está aumentando, aunque sus inversiones en estructuras no residenciales sigue siendo débil y se muestran remisas a contratar personal. Asimismo, la construcción de viviendas se mantiene a niveles muy bajos y los préstamos bancarios se contrajeron aún más.
Pese a todos esos indicadores, el Comité "prevé un retorno gradual a mayores niveles de utilización de los recursos en un contexto de estabilidad de precios, aunque el ritmo de la recuperación probablemente será más modesto de lo que se había previsto".
Respecto al nivel de precios, el órgano de política monetaria señala que la inflación subyacente mantienen una tendencia a la baja en los últimos trimestres, con lo que contribuye a mantener estables las expectativas de inflación a largo plazo.