Los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea (UE) han alcanzado un acuerdo este lunes para imponer sanciones financieras a los países que no respeten la disciplina presupuestaria, es decir, el Pacto de Estabilidad. Esas sanciones pueden llegar a la suspensión de subvenciones europeas, según ha anunciado el presidente de la UE, Herman Van Rompuy.
En la reunión del grupo de trabajo que preside Van Rompuy y que está encargado de reforzar el control presupuestario en los Veintisiete "se han discutido los grandes parámetros de una reforma del sistema de sanciones", ha explicado el presidente en un comunicado.
"Las sanciones deberán ser progresivas, y se han discutido diferentes opciones para reforzar su automatismo", ha señalado en la nota.
En un encuentro anterior del pasado 7 de junio, los ministros europeos ya acordaron crear sanciones para los países que se endeudaran demasiado y reforzar de este modo el Pacto de Estabilidad que dió origen al euro y que, en principio, limita los déficits públicos anuales a un 3% del PIB.
Retirada de ayudas europeas
Sin embargo, hasta ahora, esas sanciones no se habían definido. Este lunes, los ministros han asumido una proposición de la Comisión Europea, donde se proponen sanciones financieras, incluída la suspensión de las subvenciones agrícolas y pesqueras, y las ayudas a las regiones más desfavorecidas.
El Ejecutivo comunitario sugiere que, en un primer momento, sean advertidos con una suspensión de los pagos futuros previstos dentro de los programas europeos. Si eso no es suficiente, perderán definitivamente esos pagos.
Los trabajos que se realizan en estos momentos afectarán a los 27 países miembros de la UE, y no sólo a los 16 que forman parte de la Eurozona.
Aunque el Reino Unido ha mostrado su apoyo al fortalecimiento del Pacto de Estabilidad, su ministro de Economía, George Osborne, ha descartado que su país pueda recibir ese tipo de sanciones financieras porque, ha dicho, no forma parte del euro y no tiene previsto entrar.
Algunos países presionan para añadir también otro tipo de sanciones. Berlín y París encabezan el grupo que se muestra favorable a la suspensión de los derechos de voto en la UE, pero esa posición no ha conseguido la unanimidad.
Refuerzo del control financiero de la UE
Alemania también insiste en crear un procedimiento de declaración de quiebra de los Estados de la Zona euro, a pesar de las reservas de varios miembros. "Tenemos ideas precisas sobre la manera de realizar un proceso ordenado de reestructuración" de la deuda de un país, ha señalado este lunes el ministro de Finanzas germano, Wolfgang Schõuble, quien ha subrayado que "el Gobierno alemán está convencido de que es necesario".
Además, los ministros de Economía de la UE se han puesto de acuerdo para "prestar más atención a la deuda" en los procedimientos de vigilancia de los déficits, ha señalado el comunicado.
Los 27 responsables de Finanzas han confirmado su voluntad de que, a partir de 2011, las grandes líneas de los presupuestos nacionales de cada país sean examinadas a nivel europeo, antes de que sean debatidos en los Parlamentos nacionales.
Por último, el comunicado emitido al término de la reunión señala que "se ha logrado un amplio consenso para crear un mecanismo de control de la competitividad" de los miembros de la UE, un punto en el que Francia está muy interesado.
Este mecanismo de alerta se basará en una serie de indicadores (entre los que podrían estar los costes laborales, el déficit por cuenta corriente o el peso del sector inmobiliario, según ha propuesto la Comisión). Si un país supera determinados niveles, el Ecofin examinará en profundidad la situación y recomendará medidas correctivas, si son necesarias, en el marco de un "procedimiento por desequilibrio excesivo".