Todo está preparado en Barcelona para la manifestación de rechazo a la sentencia del Tribunal Constitucional (TC) sobre el Estatut catalán, que recorta y reinterpreta parte del texto aprobado en un referéndum en el que votó el 30% de la población de Cataluña. Esta protesta se produce justo el día después de conocerse la sentencia íntegra del TC sobre la norma autonómica.
La argumentación jurídica del TC ha generado críticas de la mayoría de partidos catalanes, que esperan que esa difusión del pronunciamiento judicial a los catalanes.
Así lo cree el presidente de la Generalitat, José Montilla, quien este sábado ha asegurado que espera que más de millón y medio de personas acudan a la manifestación porque, ha señalado, "algunos han interpretado como una provocación" el hecho de que se publique la sentencia íntegra justo antes de la protesta.
La sentencia crea "un nuevo problema catalán", según Montilla
En declaraciones a Onda Cero, el mandatario catalán ha sostenido que la difusión de la argumentación jurídica del TC "puede ayudar a que venga más gente a la marcha" y ha agregado que: "No sé si esto es precisamente lo que quería conseguir el Constitucional con esta publicación, pero es lo que va a hacer".
Para Montilla, eran "absolutamente innecesarias" algunas de las cuestiones que se plantean como inconstitucionales, lo que, a su juicio, "atenta" contra la dignidad de los catalanes. El presidente de la Generalitat ha incidido en este punto y ha subrayado que la sentencia va contra la dignidad de Cataluña, porque "limita y modifica" aquello que se votó en referéndum.
Por eso, el dirigente socialista cree que el pronunciamiento judicial "no va a ayudar a resolver el problema catalán, sino que ha creado uno nuevo".
Además, en su opinión, esta sentencia la emite un Tribunal "desprestigiado" y con algunos de sus miembros que "deberían haberse ido". Y todo ello, después de cuatro años de "calumnias", en los que incluso la Fundación Faes llegó a señalar que el Estatut "favorecía la poligamia".
Durante la entrevista, Montilla ha reconocido que la participación en el referéndum sobre el Estatuto no fue todo lo alta que se deseaba, aunque -ha recordado- sí hubo más participación que en algunas elecciones europeas.
Por su parte, la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha advertido que le parece "muy grave, muy peligroso y una tremenda irresponsabilidad que el mismo partido que gobierna en España, el partido del señor Rodríguez Zapatero, convoque una manifestación en contra de organismos constitucionales".
Apoyo de más de 1.000 entidades
La manifestación de este sábado ha sido organizada por la entidad catalanista Òmnium Cultural y cuenta con el apoyo de más de un millar de entidades, entre ellas las universidades, los sindicatos y las patronales catalanas, el Fútbol Club Barcelona, partidos como PSC, CiU, ERC e ICV-EUiA e, incluso, instituciones como el Monasterio de Montserrat.
Una gran senyera, de 250 metros cuadrados, flanqueada por el lema oficial de la manifestación dividido entre "somos una nación", en un lado, y "nosotros decidimos", en el otro, encabezará la marcha.
El presidente catalán, José Montilla, y los ex presidentes Pasqual Maragall y Jordi Pujol, así como el presidente actual del Parlament, Ernest Benach, y sus precursores, Joan Rigol y Heribert Barrera, irán tras la bandera catalana.
A continuación, se situará una pancarta con el lema completo "Somos una nación. Nosotros decidimos", y allí se situarán representantes de las organizaciones convocantes de la marcha, entre ellos el presidente de CiU, Artur Mas, el de ERC, Joan Puigcercós, y la presidenta de Òmnium, Muriel Casals.
La marcha concluirá con la interpretación del himno catalán, Els Segadors, en la Plaza Tetúan barcelonesa, donde se sumarán ciudadanos llegados de toda Cataluña en los 400 autocares fletados por la organización.