La organización ecologista Greenpeace llevaba tiempo esperando la oportunidad de recriminar a British Petroleum su gestión del vertido de crudo en el Golfo de México. Por eso, envió este martes a Emma, una colaboradora, al Congreso Mundial de compañías petroleras. Pero ni Emma pudo cumplir su objetivo, ni el consejero delegado de BP se presentó a la reunión.
La empresa sustituyó la ponencia de Tony Hayward por la de Steve Westell, otro cargo del grupo, y ha excusado la ausencia del consejero delegado por su "dedicación absoluta a la limpieza del derrame". Sin embargo, este fin de semana, fue "pillado" en una regata de yates de lujo en la Isla de Wight, al sur de Inglaterra.
A pesar de la ausencia de Hayward, Greenpeace quería hacer oir su voz y cuando Westwell comenzó a leer su discurso, la ecologista de Greenpeace intentó boicotear el acto con una pancarta con el símbolo de BP salpicado con pintura negra, y al grito de "pongamos fin a la era del petróleo".
"Dado que BP es incapaz de decir la verdad. Yo les voy a decir lo que necesitan saber, (...) hay que detener la perforación en aguas profundas", le dio tiempo a decir antes de ser evacuada por los servicios de seguridad.
Un veterano de BP se pondrá al frente de la crisis
Tony Hayward, fue retirado de la gestión diaria de la crisis del derrame de petróleo, después de una serie de meteduras de pata y por su fracaso para detener la fuga de crudo. Una decisión que fue tomada antes de que los tribunales prohibieran temporalmente la perforación en aguas profundas del Golfo de México.
La prohibición de seis meses está siendo impugnada por las empresas petroleras, pero cuenta con gran apoyo entre la población y en otros lugares después de que las zonas de pesca más se cerraran el martes en respuesta al peor derrame en la historia de EE.UU.
El manejo de Hayward de la crisis ha provocado amargas críticas y Westwell ha indicado que Bob Dudley, un veterano de las actividades de BP en Rusia, se haría cargo de la respuesta al derrame. Hayward mantendrá su participación mayoritaria, pero su actividad será "menos práctica", ha afirmado.
El juez Martin Feldman ha prometido que decidirá el miércoles si se debe levantar o no temporalmente la prohibición, mientras que el caso sea oído. Más de una docena de compañías que participan en operaciones de perforación mar adentro presentaron una demanda por considerar la prohibición "arbitraria y caprichosa".