El presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, afirma que los empresarios mantienen "intacta" su voluntad de diálogo, pero advierte de que "nunca" renunciarán a sus principios.
Durante su discurso en la Asamblea General ordinaria de la CEOE, Díaz Ferrán ha puesto de manifiesto que el tiempo "ha dado la razón" a los empresarios y que finalmente el Gobierno ha optado por acometer reformas estructurales que la patronal venía reivindicando hace tiempo, como la laboral.
En este sentido, apunta que el decreto de reforma laboral que convalida esta tarde el Congreso es un "punto de partida aún insuficiente y debe ser mejorado". Confía en que el proyecto de Ley de reforma laboral se tramite de "urgencia" e incorpore mejoras "sustanciales". "No es tiempo de reflexión", asevera, sino de aplicar una terapia de choque que intente restaurar la confianza en la economía.
La CEOE seguirá pidiendo que la reforma laboral sea más ambiciosa en aspectos como la flexibilidad interna, la negociación colectiva, la extinción de los contratos, la eliminación total de los despidos de 45 días o la "creciente sindicalización" que el decreto puede producir en las pymes, algo que "preocupa" a la organización.
Reforma "insuficiente"
Recuerda que cuando en julio de 2009 la CEOE pedía reformas de calado fue objeto de una campaña de "descalificación" y que, sin embargo, un año después el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, ha reconocido que hacer antes la reforma podría haber contenido parte de la destrucción de empleo.
Ese reconocimiento, señaló Díaz Ferrán, ha ido acompañado de otras declaraciones del Gobierno sobre la necesidad de hacer reformas "que antes negaba" y añadió que "por el camino se ha perdido un tiempo precioso que se ha llevado a miles de empresas y puestos de trabajo.
Ha reiterado el esfuerzo que hicieron los empresarios por alcanzar un pacto y subraya que "incluso" hubieran estado dispuestos a renunciar a algunas de sus reivindicaciones, como la reducción de cuotas a la Seguridad Social o al contrato único, con tal llegar al consenso.
En este sentido, Díaz Ferrán volvió a acusar a los sindicatos de tener una "actitud inmovilista" y de no haber tenido en cuenta la situación económica actual.
Los sindicatos también critican la reforma
Por su parte, los sindicatos CC.OO. y UGT también ha criticado la reforma laboral, asegurando que no actúa debidamente sobre la dualidad del mercado de trabajo y hace que el empleo fijo sea igual de vulnerable que el temporal.
Así lo han expresado los secretarios de Acción Sindical de CC.OO., Ramón Górriz, y de UGT, Toni Ferrer, en una rueda de prensa conjunta en la que presentaron el documento que ambos sindicatos han enviado a los grupos parlamentarios sobre el decreto ley de la reforma laboral que hoy estudia el Congreso.
Para los sindicatos, será el contrato indefinido ordinario "el claro damnificado" ya que, a pesar de que el Gobierno ha asegurado que no perjudicaría a esta modalidad de contratación, "queda definitivamente arrinconada y sin futuro".
Górriz ha afirmado que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "ha optado por ser el comisario político de los mercados en España", mientras que Ferrer se ha dicho preocupado por la rapidez con la que se pide que se tramite el decreto. Con la tramitación "ultra rápida", ha comentado, es posible que se pretenda ocultar el debate parlamentario y "aflorar modificaciones regresivas" a los derechos a los trabajadores en el proceso de enmiendas. "Nos gustaría que se nos demuestre lo contrario", ha indicado.