El ministro de Justicia, Francisco Caamaño, ha avanzado este martes que la futura ley de libertad religiosa limitará el uso del burka en espacios públicos, como ya han decidido algunos ayuntamientos en Cataluña.
Caamaño ha realizado este anuncio en la sede de su departamento tras presentar la memoria de 2009 de la Fundación Pluralismo y Convivencia, entidad pública que se dedica a financiar proyectos de minorías religiosas.
Sobre si la futura norma va a prohibir el burka, el ministro ha asegurado que es algo que "lo tendrán que decidir las Cortes Generales" aunque ha avanzado que el Ejecutivo es partidario de alguna restricción.
Caamaño cree que "hay elementos como el burka que son difícilmente compatibles con la dignidad del ser humano y sobre todo con elementos fundamentales en los espacios públicos como es la identificación".
En este sentido, ha añadido que "lo coherente es que no existan prendas de esta naturaleza, que sean difícilmente compatibles con su utilización en las actividades o en escenarios públicos".
Esta noticia se conoce tan sólo un día después de que el alcalde Barcelona, Jordi Hereu, anunciara que se iba a prohibir el uso del burka en instalaciones municipales, como previamente ya habían acordado los consistorios de Lleida y El Vendrell. Además, Tarragona aprobó ayer por la tarde el veto al velo integral.
A prinicpios de mayo, el propio Caaamaño ya se pronunció sobre la necesidad de que la futura ley fuera "clara" respecto al uso del velo aplicando "el sentido común y la tolerancia".
En este sentido, Caamaño insistió en que la ley tendrá que "precisar qué elementos religiosos de identificación personal puede portar un ciudadano dentro de los espacios públicos", de acuerdo a una proporcionalidad con las funciones que se realizan en esos entornos.
Por su parte, el titular de Educación, Angel Gabilondo, también se pronunció sobre el tema cuando estalló la polémica de Nawja, una niña musulmana a la que se le prohibió usar el pañuelo islámico (hiyab) en su centro escolar en Pozuelo de Alarcón (Madrid). Entonces, Gabilondo subrayado que el 'hiyab' y el 'burka' "no son lo mismo" y reclamó que, antes de tomar medidas, se establezca un debate serio y riguroso, que aborde la libertad religiosa y el significado de los símbolos, como el que se produce en otros países europeos.