El presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Dívar, ha exigido a los vocales del órgano de gobierno de los jueces que mantengan el secreto de sus deliberaciones y que eviten las filtraciones.
Un día antes de que el pleno del CGPJ decida sobre la suspensión del juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón tras dictar el Tribunal Supremo auto de apertura de juicio oral contra él, Dívar ha destacado la necesidad de tener "serenidad en determinados momentos".
El presidente del CGPJ y del Tribunal Supremo, que ha hecho estas declaraciones en la firma de un convenio con el ministro de Justicia, Francisco Caamaño, ha asegurado que se viven en la Administración de Justicia tiempos "convulsos y revueltos", pero que se ven así más desde fuera que desde dentro.
Tras sostener que dentro de la Administración de Justicia están tranquilos y que en el seno del órgano de gobierno de los jueces trabajan en paz y tranquilidad", ha reconocido que los "elementos exteriores tratan siempre de perturbar el sosiego y la paz que debe presidir siempre la actuación judicial".
Los jueces -ha indicado Dívar- tienen en sus procesos sus tiempos y sus momentos y "muchas veces pueden aparecer como lentos", lo que no debe confundirse con los retrasos "y mucho menos con la provocación al retraso".
Eludir las declaraciones
Dívar ha insistido en que los jueces deben eludir en sus actuaciones jurisdiccionales las declaraciones, aunque ha defendido que tengan su opinión sobre los temas que están sometidos a su decisión, y los vocales, las filtraciones sobre sus deliberaciones.
"Difícilmente hay una libertad completa cuando sabemos que puede haber" filtraciones, ha explicado Dívar, quien ha considerado que los miembros de la carrera judicial y del Poder Judicial deben contestar a estas situaciones con "silencios sonoros".
Horas antes de estas declaraciones, uno de los vocales del CGPJ Antonio Dorado Picón afirmaba en Onda Cero que el haber recibido el auto de apertura de juicio oral contra Garzón "es requisito objetivo para decretar la suspensión" del juez.
Añadía que "no cabe un no" a la suspensión de Garzón porque "es automático porque la Ley Orgánica, en el artículo 383, establece los supuestos de suspensión de un juez o un magistrado" y el de Garzón es "uno de esos supuestos".
Sobre la petición de Garzón para marcharse a La Haya, ha indicado que la ley también contempla que "la suspensión es incompatible con los servicios especiales".