La morosidad de los créditos concedidos por bancos, cajas de ahorros, cooperativas y establecimientos financieros de crédito a particulares y empresas se situó en enero en el 5,30%, el nivel más alto desde mayo de 1996, cuando alcanzaba el 5,31%, según datos del Banco de España.
Con todo, los establecimientos financieros de crédito (EFC) -intermediarios que no pueden captar fondos reembolsables, como depósitos, y que sólo pueden conceder préstamos de hasta 3.000 euros- no se incluyen en el cómputo moroso total del sistema financiero español para evitar que distorsionen el porcentaje general, ya que su mora es mucho más elevada que la de las otras entidades; de hecho, en enero fue del 10,21%, aunque se mantuvo sin cambios con respecto a diciembre.
De este modo, excluyendo los EFC, el ratio del sector registró en enero el 5,18%, la más alta desde abril de 1996 (5,27%) y por encima de la barrera del 5%, que supera tras acercarse a ella en noviembre (4,938%) y en diciembre (4,957%).
La mayor mora, en las cajas
Al margen de los EFC, las cajas fueron de nuevo las que registraron una morosidad más elevada, del 5,34%, frente al 5,05% de diciembre, aunque cada vez más igualada con la de los bancos, que en enero alcanzaron el 5,18%, también creciendo con respecto al 5,01% del mes anterior.
Así, la tasa de enero supera en 1,42 puntos la de hace un año (3,88%), pero incrementa sólo en 0,23 décimas el nivel de diciembre (5,07%). El sector asegura que la tasa crecerá hasta mediados de año, coincidiendo con el previsible incremento del desempleo, pero que en el segundo trimestre alcanzará su nivel más alto y a partir de ahí comenzará a descender hasta finales de año.
Los créditos totales del sector alcanzaron en enero 1,81 billones de euros, un 2,68% menos que hace un año (1,86 billones) y un 1,09% por debajo del nivel de diciembre (1,83 billones), mientras que los créditos dudosos se situaron en enero en 96.259 millones, un 33% más que hace un año y un 3,16% más que en diciembre. Sin los EFC, los créditos totales alcanzaron 1,77 billones de euros y los dudosos, 91.853 millones de euros.
El continuo crecimiento de la morosidad ha llevado a las entidades a redoblar esfuerzos para incrementar sus provisiones. En concreto, las entidades tenían provisiones en enero por 55.420 millones de euros, un 22% más que hace un año (45.407 millones) y un 1,24% más que hasta diciembre (54.741 millones).