La secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, ha advertido al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, de que su Gobierno está poniendo en peligro las relaciones con EE.UU., al no tomar medidas reales hacia las renovadas conversaciones de paz en Oriente Medio.
Clinton ha llamado por teléfono a Netanyahu y le ha transmitido su frustración por el anuncio de Israel el pasado martes de construir nuevos asentamientos, una medida que profundamente avergonzó al vicepresidente de EE.UU., Joe Biden, que se encontraba de visita en la zona, y ha planteado dudas sobre los planes para poner en marcha las negociaciones indirectas entre Israel y los palestinos.
El portavoz del Departamento de Estado norteamericano, P.J Crowley, ha asegurado que Clinton le ha dicho a Netanyahu que el anuncio fue una "señal muy negativa sobre el enfoque de Israel en las relaciones bilaterales y ha socavado la confianza en el proceso de paz".
"La secretaria le ha expresado que no podía entender cómo ha podido suceder esto, en particular sabiendo el fuerte compromiso de EE.UU. en garantizar la seguridad en Israel", ha afirmado Crowley.
"Ha dejado claro que el Gobierno israelí necesita demostrar con acciones específicas, no sólo con palabras, que están comprometidos con esta relación y con el proceso de paz", ha señalado.
Preguntado sobre si el tono de la llamada era de enfado, Crowley ha respondido que "frustración sería un término mejor".
Los reproches de Clinton a Netanyahu coronan una semana de tensos intercambios de declaraciones entre EE.UU. e Israel, a raíz de que anunciaran la construcción de 1.600 nuevas viviendas en la Cisjordania ocupada.