La nueva Comisión Europea ha efectuado hoy su primer nombramiento de importancia: el representante de la Unión Europea en Washingto. Para ello ha elegido al portugués Joao Vale de Almeida, hombre de confianza del Presidente Durao Barroso.
Se trata del funcionario de más alto rango a cargo de las relaciones exteriores de los 27 y que, para el presidente de la Comisión, pone de relieve "el compromiso político para mejorar las relaciones transatlánticas" en un momento "crucial de cooperación bilateral y fomento de la gobernanza mundial".
Con su nombramiento se cubre así un cargo que lleva vacante desde diciembre de 2009, cuando cesó en su cargo John Bruton.
Puesto complicado
No va a tenerlo fácil Vale de Almeida, pues Washington es una de las plazas más complicadas de torear, dado que debe intentar mantener las buenas relaciones con Estados Unidos.
Su objetivo será evitar nuevas vergüenzas, como la vivida tras la suspensión de la Cumbre UE-EE.UU. que iba a celebrarse en Madrid en el mes de mayo.
En los próximos meses, reza el comunicado de la Comisión Europea, tomará posesión de su cargo "siguiendo los procedimientos" del país.
Un hombre de Barroso
El portugués es ahora mismo director general de Relaciones Exteriores de la Comisión Europea, y ha actuado como representante del presidente Durao Barroso en la preparación del G8 y de las cumbres del G-20, además de ser portavoz de la CE durante la década de los 90.
Con formación de periodista en Francia y los Estados Unidos, desde que fuera nombrado en su cargo actual, Vale de Almeida ha sido responsable de los asuntos de política exterior de la Unión Europea y también ha tenido que supervisar a los 120 delegados de la UE en el extranjero.
Con este nombramiento el Servicio de Acción Exterior de la Unión Europea que capitanea Catherine Ashton empieza a ponerse en marcha. Por ahora está sentando las bases del que será su cuerpo diplomático, un proyecto que estará listo a finales del mes de abril.