La secretaria general del PP, María Dolores De Cospedal, ha exigido este lunes la configuración de un marco único estatal en el que se establezcan los derechos y libertades de los extranjeros en España, de modo que tal reconocimiento dependa sólo del Gobierno, nunca del padrón ni de los alcaldes.
De Cospedal, en la conferencia de prensa que ha ofrecido después de la reunión del Comité de Dirección, ha insistido en que ésta es la exigencia del PP ahora que el debate sobre la inmigración legal e ilegal se ha instalado en la opinión pública a raíz de las polémicas surgidas en los consistorios de Torrejón (Madrid) y Vic (Barcelona).
La dirigente del PP, en el marco de ese debate "amplio" que propugna el PP, ha hecho hincapié en recalcar que la Ley de Extranjería actual, al igual que otras normativas, como las de ámbito municipal, generan "contradicciones", y por tal motivo, urge "un marco regulatorio claro" y único en todo el territorio, de tal forma que ni el padrón ni "la voluntad de los ayuntamientos" sean determinantes.
Los alcaldes "cargan con una decisión que no les corresponde"
Un debate del que se ha hecho eco este lunes el Comité de Alcaldes del PP, reunido en la sede nacional, toda vez que ha trasladado algunas propuestas para la regulación de los derechos de los extranjeros, la mayoría de ellas ya recogidas en las iniciativas parlamentarias que sobre tal cuestión ha desarrollado el grupo popular en el Congreso.
Éstas son: prohibir las regularizaciones masivas, un mayor control de las fronteras, el contrato de integración para residentes con el fin de garantizar la igualdad, más eficacia en las expulsiones, así como que éstas sean preferentes cuando deban aplicarse a inmigrantes con penas superiores a seis años; y más rigor en los permisos de residencia.
Hasta la fecha, ha afirmado De Cospedal, el Ejecutivo del PSOE "está de espaldas" a la inmigración "y sin actuar", y así, entretanto, los alcaldes "cargan" con una decisión que no les corresponde.
El padrón reconoce los derechos de los inmigrantes "de facto"
La secretaria general del PP, tras señalar que esta posición es la que lleva sosteniendo su partido desde hace tiempo, ha incidido en que si bien el padrón no reconoce derechos a los inmigrantes, tal y como recoge la Ley de Bases del Régimen Local, "de facto sí" lo hace.
Porque, ha añadido, "si un extranjero quiere pedir un permiso social o asistencia sanitaria, enseña su empadronamiento".
Además, ha diferenciado los casos en Vic y en Torrejón, ya que mientras en la primera localidad se trataba de "no empadronar a los que no tengan residencia legal", en la segunda era cuestión de no facilitar "empadronamientos masivos donde se sabía que en una residencia de 50 metros vivían por ejemplo 50 personas".