La policía israelí ha detenido a un hombre de 60 años, acusado de incesto y abuso de mujeres y niños que mantenía como esclavos en varias viviendas de Tel Aviv.
Goel Ratson presumía de tener varias decenas de mujeres, se sospecha que 32, y un centenar de hijos, sobre las que la policía afirma que tenía un poder extremo.
"Las pruebas demuestran que el sospechoso controlaba 'sus' mujeres con mano dura, incluidas sus posesiones y su dinero", ha dicho la policía en un comunicado, que ha agregado el acusado redactó un "código de normas" para las mujeres que mantenía en "condiciones de esclavitud".
"Él habría dictado qué podían hacer y qué no, limitando sus movimientos e imponiendo sanciones y varios castigos, incluyendo el uso de la violencia si se negaban a obedecer".
Incesto con sus propias hijas
El detenido está acusado de mantener relaciones con sus propias hijas y de tener hijos con las mismas.
Algunas de sus esposas aparecieron el pasado año en un documental de la televisión israelí. Una de ellas llegó a afirmar que "él es el Mesías del que todo el mundo habla". "Él ya está aquí aunque todavía no ha sido revelado. El día que decida revelarse, la Tierra temblará".
Esta mujer apareció en el reportaje vestida con el pesado traje de los judíos ortodoxos y con tatuajes que representaban la cara del detenido. LLegó a presentar a varios de sus hijos ante las cámaras, todos con nombres que eran variantes de Goel, Redentor en Hebreo.
"Soy perfecto", dijo Ratson en el documental, y agregó "tengo todas las cualidades que una mujer desea".
Su abogado, Shlomtzion Gabai, ha afirmado que unas 30 mujeres y 60 niños han sido relacionados con su defendido, y ha dicho que "en lo que a él respecta no se han cometido crímenes sexuales".