"Si fuese el centro ideológico estaría varias tribunas más allá". Con esta broma el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha querido quitar importancia al hecho de que se colocase entre el presidente del Consejo y el de la Comisión en la inauguración de la Presidencia española de la UE, pese a que tras el Tratado de Lisboa quien tiene que presidir los actos es el belga Van Rompuy.
"Estamos en Madrid, estamos en España y el que hace de anfitrión preside los actos", ha aclarado Zapatero a la pregunta de un periodista belga -de la misma nacionalidad que Van Rompuy- que calificó la ubicación de los tres como un gesto político.
La convivencia entre el nuevo presidente de la UE y el presidente del Gobierno que ejercer la Presidencia de turno centra buena parte del interés de la comunidad europea en el arranque de 2010.
Ambos han sido preguntados sobre quién será el que 'coja' el teléfono de la UE en el caso de que haya una crisis internacional y haya que ponerse en contacto con los 27.
Tras asegurar que las situaciones suelen ser más complejas y que lo primero que harían sería convocar al resto de líderes de la UE, Zapatero ha terminado por reconocer que ese teléfono estaría en la mano de Van Rompuy y que a él le correspondería convocar a los mandatarios europeos.
El Tratado de Lisboa establece que ésa es una función del presidente permanente del Consejo y de hecho no da ninguna función concreta al presidente del Gobierno que ejerce la Presidencia rotatoria.
La cumbre informal de febrero, primer escenario
La 'tricefalia' generada entre el presidente de la Comisión, el del Consejo y el Rotatorio también ha generado dudas a la prensa, que les ha preguntado qué papel va a jugar cada uno en la estrategia de salida a la crisis económica, que tendrá su primera cita en una cumbre informal convocada en febrero.
Van Roumpuy se ha encargado de aclarar que a él le corresponde la coordinación de ese encuentro, mientras Zapatero ha añadido que Barroso pondrá negro sobre blanco las conclusiones a las que se lleguen en el mismo.
¿Y cuál sera el papel del presidente español? "Aportar ideas". Para conocerlas, habrá que esperar a la comparecencia de Zapatero ante el Parlamento Europeo, el próximo 20 de enero.