El grupo automovilístico estadounidense General Motors registró unas pérdidas netas de 1.151 millones de dólares (unos 777 millones de euros) en el periodo comprendido entre el 10 de julio, cuando salió de la quiebra, y el 30 de septiembre de este año, según ha informado la compañía.
Aunque los resultados no son directamente comparables, durante el tercer trimestre de 2008 General Motors sufrió unas pérdidas de 2.500 millones de dólares (unos 1.670 millones de euros).
La corporación, que recientemente descartó la venta de su filial Opel tras mejorar su situación financiera, obtuvo una facturación de 26.352 millones de dólares (17.805 millones de euros) en el periodo transcurrido después de que la compañía emergiera del proceso de suspensión de pagos.
En el conjunto del tercer trimestre, los ingresos ascendieron a 28.000 millones de dólares, lo que representa unos 4.900 millones de dólares más que los ingresos del segundo trimestre de este año. La empresa también ha detallado que su resultado antes de intereses e impuestos (EBIT) fue una pérdida de 261 millones de dólares.
El consejero delegado del grupo, Fritz Henderson, ha detallado que las operaciones europeas de la compañía generaron unas pérdidas de 400 millones de dólares (270,2 millones de euros). Pese a todo, las operaciones internacionales de General Motors en ese período fueron rentables en su conjunto.
Devolver las ayudas
La compañía prevé cerrar el año con unos flujos de caja negativos, como consecuencia de la reestructuración que está llevando a cabo su anterior filial Delphi y por la devolución de los créditos públicos concedidos por los gobiernos de Estados Unidos, Canadá y de Alemania, así como por los costes de reestructuración.
En un comunicado, el grupo avanza que pretende "acelerar los reembolsos [de las ayudas] a Estados Unidos, así como a los Gobiernos canadiense y estadounidense, a través de pagos trimestrales", con "un primer pago de 1.200 millones de dólares en diciembre".
“Los resultados de hoy muestran que la nueva GM parte de bases sólidas“
"Nos queda mucho trabajo, pero los resultados de hoy muestran que la nueva GM parte de bases sólidas. Con un balance saneado y una estructura de costes competitiva, concentramos nuestros esfuerzos en elevar la cifra de negocios", comenta en el comunicado el consejero delegado.