El juez Baltasar Garzón ha comenzado a tomar declaración este viernes a Arnaldo Otegi , uno de los diez detenidos el pasado martes en el País Vasco y Navarra, acusados de intentar reconstruir la ilegalizada Batasuna, según informa TVE.
Ya son cinco los arrestados que han pasado por el despacho del juez en una hora, por lo que alguno podría haberse negado a declarar. La primera en declarar ha sido Ainara Oiz, arrestada cuando intentaba sacar documentos del domicilio de la también detenida Miren Zabaleta, hija del líder de Aralar Patxi Zabaleta y una de las dirigentes emergentes de la izquierda abertzale.
También declararán este viernes ante Garzón el líder histórico de Batasuna Rufino Etxeberría; la ex tesorera del PCTV, Sonia Jacinto, así como Arkaitz Rodríguez, José Manuel Serra, José Luis Moreno Sagües y Amaia Esnal.
Después de interrogarles, Garzón deberá decidir si ordena su ingreso en prisión preventiva o los deja en libertad.
Todos ellos fueron detenidos el pasado martes por su presunta participación en el proyecto creado en torno a un grupo que se autodenominaba "Bateragune" -núcleo de reunión, en euskera-, y que se reunía periódicamente en la sede del sindicato LAB en San Sebastián, donde fueron arrestados Otegi, Etxeberría, Díez Usabiaga y Zabaleta.
Ha sido detenido junto a ocho miembros de la nueva Mesa Nacional de Batasuna.
El germen de una futura Mesa Nacional
Según el Ministerio del Interior, los arrestados habrían formado un grupo llamado 'Bateragune', que en euskera significa punto de encuentro y que sería el germen de una futura Mesa Nacional, que al parecer tenía como primer objetivo el regreso de Batasuna a las instituciones políticas del País Vasco.
La detención de Otegi se ha producido poco más de un año después de que saliera de la cárcel tras cumplir quince meses de condena por un delito de enaltecimiento del terrorismo, y cuando la Audiencia Nacional ya ha dictado la apertura de otro juicio contra él por este mismo delito cometido presuntamente en un acto celebrado en el velódromo de Anoeta el 14 de noviembre de 2004.
Sin embargo, para Díez Usabiaga es su primer arresto, quien, tras décadas de militancia en la izquierda abertzale, se ha visto implicado en una operación policial contra la cúpula de la formación ilegalizada.
En esta operación se están registrando la sede central de LAB en San Sebastián y los domicilios de los detenidos.