La confianza de los consumidores descendió en septiembre, tras seis meses al alza, debido a las peores perspectivas de los encuestados sobre la situación actual y futura respecto a la economía y el empleo.
Así, el Indicador de Confianza de los Consumidores del Instituto de Crédito Oficial (ICO) se redujo en septiembre en 9,2 puntos hasta los 70,3 puntos.
Esta cifra es una media del indicador de situación actual, que bajó 7,7 puntos hasta los 44,7, y del de expectativas, que se redujo en mayor medida, 10,8 puntos, hasta los 95,9.
Según el ICO, el hecho de que, según las previsiones de los organismos internacionales la recuperación económica en España será más gradual que en otros países, ha podido influir en el empeoramiento de las perspectivas económicas de los encuestados para los próximos meses y mermar sus expectativas de ahorro y de consumo duradero.
El indicador de expectativas ha bajado más tanto por la peor percepción que se tiene del futuro del empleo (13,4 puntos menor) como de la situación económica española (12,9 puntos más baja), y los ciudadanos también son más pesimistas sobre el futuro de su propia situación (6,1 puntos menos).
Menos pesimistas que hace un año
En cualquier caso, en un año las expectativas han mejorado en el último año 30,4 puntos, lo que muestra que los ciudadanos son ahora menos pesimistas que en otoño de 2008.
En cuanto al indicador de la situación actual, la bajada de 7,7 puntos se explica por la peor percepción de la situación económica (11,4 puntos más baja) y del empleo (8,5 puntos menor), mientras que la situación del hogar se ve menos favorable, aunque no tanto (3,4 puntos menos).
En septiembre, han aumentado las expectativas de inflación y de subida de los tipos de interés, y los consumidores tienen menores perspectivas de ahorro y de bienes de consumo duraderos.
En comparación con los datos de hace un año, las perspectivas sobre subida de tipos son menores y la percepción sobre las posibilidades de ahorro y de consumo duradero han aumentado.
Los jóvenes confían más en el futuro
Los más jóvenes -de dieciséis a veinticuatro años- siguen siendo los más optimistas sobre el presente y el futuro de la economía, ya que su indicador de confianza es el mayor, de 81,3 puntos, y son los mayores de 65 años los más pesimistas, con un ICC de 63,7 puntos.
La confianza también es mayor en las ciudades más pobladas, con un indicador de 72,3 puntos en los municipios con más de medio millón de habitantes, frente a los 70 puntos de los de menos de 10.000.
El indicador de confianza del consumidor se calcula como media aritmética de los balances de la situación actual y las expectativas.
El ICC-ICO, y sus dos componentes de situación actual y expectativas, pueden tomar valores que oscilan entre 0 y 200; una lectura por encima de 100 indica una percepción favorable/optimista de los consumidores acerca de las preguntas planteadas y por debajo de 100 una percepción negativa/pesimista.