Las subidas acumuladas en el último mes ha propiciado este lunes una recogida de beneficios en los mercados bursátiles, de forma que la Bolsa de Madrid ha caído un 2,78%, el mayor descenso desde mediados de mayo. El principal selectivo de la bolsa española, el Ibex-35, ha perdido 303,40 puntos, con lo que ha cerrado en los 10.598,50 puntos.
También ha mostrado números rojos el resto de parqués europeos, ya que París se desplomaba un 2,16%, en tanto que Fráncfort se dejaba el 2,02% y Londres, el 1,46%.
La recogida de beneficios se ha impuesto pese a los buenos datos macroeconómicos conocidos como la recuperación de la economía japonesa, que ha vuelto a registrar crecimientos tras cinco trimestres consecutivos de descensos, o la balanza comercial europea, que ha resultado mejor de lo esperado.
Constructuras y bancos, a la baja
Las constructoras y las entidades financieras han sido los valores más perjudicados de la bolsa española, con caídas superiores a la media del selectivo Íbex-35, donde sólo una empresa (Grifols) esquivaba las pérdidas. La compañía más bajista del indicador ha sido OHL, que se ha desplomado el 7,10%, seguida en el Ibex-35 por Sacyr Vallehermoso, con el 4,37%, y por el Popular, con el 4,07%.
Además de la entidad financiera presidida por Ángel Ron, BBVA también ha registrado una importante caída, del 3,71%, seguida del Sabadell, con el 3,67%, y del Santander, con el 3,15%.
Entre el resto de pesos pesados del selectivo español también se ha impuesto las pérdidas, ya que Telefónica ha cedido el 2,88%, en tanto que Repsol se dejaba el 2,54% e Iberdrola, el 1,90%.