Los dos varones heridos ayer en Eibar por la explosión de un obús de la Guerra Civil que estaban manipulando, han perdido, respectivamente, un brazo y una mano, y además sufren quemaduras en el 70 y el 30% de su cuerpo.
Según el último parte médico dado a conocer por el Hospital de Cruces (Barakaldo) un hombre de 50 años ingresó con lesiones por explosión y quemaduras en el 70% de su cuerpo. Además, tenía afectada la vía aerea por lo que tuvo que ser intubado y fue necesario amputarle un brazo. Su pronóstico es muy grave.
El otro hombre, de 36 años, ingresó con quemaduras en el 30% de su piel, especialmente en cara y brazos. Este paciente tiene un pronóstico grave y le fue amputada una mano.
La Ertzaintza ha encontrado un numeroso arsenal compuesto de explosivos de varios tipos, unas 300 piezas, entre los que hay obuses, granadas e incluso creen que fusiles.