El bailarín Joaquín Cortés estrena este jueves en el Teatre Tívoli de Barcelona su nuevo espectáculo, Calé, en el que hace una retrospectiva de sus 20 años en los escenarios desde que este "'enfant terrible' inventó la fusión del flamenco" y el sector purista le quería "matar", ha recordado Cortés, a lo que ha añadido que ahora "todos" hacen fusión.
"Me quedan algunos añitos más, no muchos", ha declarado Cortés, que bailará "hasta que el cuerpo aguante", y ha deseado llegar a cumplir los 80 años pero no "con las botas puestas", ha dicho.
En el ecuador de su carrera, Joaquín Cortés presenta una superproducción que implica a 50 profesionales, entre ellos 10 bailarinas y 16 músicos en escena, una nueva obra que "capta la esencia" de las seis anteriores, entre las que se cuentan Pasión Gitana, la obra española más vista en el mundo, que estubo de gira durante cuatro años y tuvo 1,5 millones de espectadores.
Tras reconocer que el año pasado tuvo algunos "problemas familiares", ahora le apetecía mucho "salir a girar por el mundo" con Calé, donde hace "cuatro o cinco" apariciones, una de ellas un solo al compás de sus músicos.
Reconocido por la Unesco
Joaquín Cortés, que fue el primer español en actuar en la gala de los Oscar, acaba de ser reconocido por la Unesco por su creación en el mundo de la danza. "Ya era hora", ha segurado el bailarín, reivindicando su papel rompedor e innovador en la danza.
El bailarín vuelve al Teatre Tívoli, donde ofrecerá cinco únicas funciones desde este jueves hasta el 15 de mayo, para luego presentar Calé en el teatro madrileño Gran Vía del 1al 5 de abril.
Después empezará la gira internacional el 14 de mayo en Nueva York, aunque espera volver para actuar por más ciudades españolas con Calé, a pesar de que la agenda esté "complicada".