En medio de una severa ola de frío, la crisis por la "guerra del gas" entre Moscú y Kiev ha escalado a un nivel sin precedentes con cortes totales o muy sustanciales de los suministros a los países de Europa central y del sureste. Los últimos han sido Hungría, Serbia, Alemania y Francia, que han empezado a notar la ausencia del combustible.
La 'guerra del gas' se extiende como una mancha de aceite. Ahora ha sido el turno de Hungría y Serbia, donde suministro de gas ruso ha quedado interrumpido por completo esta tarde debido a la actual disputa entre Rusia y Ucrania. La interrupción total pone en aprietos sobre todo a Serbia, que se ha quedado así este martes con gas para apenas unas horas.
En Francia, los envíos rusos de gas a través de Ucrania se han hundido en un 70%. Esta bajada, que no se había producido hasta hoy, está siendo atajada por la empresa francesa gracias a la diversidad de las fuentes de aprovisionamiento de GDF Suez, que compra el producto en nueve lugares diferentes, ha indicado el grupo en un comunicado.
En otro lugares la situación es peor. El suministro a Austria, por ejemplo, se ha reducido este martes en un 90 por ciento, según ha informado la compañía gasística y petrolera OMV. A pesar de esta "limitación significativa" del gas natural procedente de Rusia, el abastecimiento de Austria "está de momento garantizado en las condiciones actuales" (climáticas y de nivel de consumo), ya que los volúmenes de gas que faltan son compensados de las reservas almacenadas en la república alpina, añadió la empresa.
La situación es especialmente difícil en Macedonia, donde ya no llega gas, y en Eslovaquia, donde el Gobierno ya ha declarado el estado de emergencia. Serbia también denuncia que recibe sólo la mitad de lo que pide, mientras que en Bulgaria hay 2.500 hogares sin calefacción en medio de una intensa ola de frío.
Además, la principal compañía de gas y petróleo de Croacia, INA, ha comunicado que los suministros de gas natural de Rusia a Croacia han sido cortados por completo esta madrugada, si bien se recuperaron levemente a mediodía del martes. Como consecuencia, la empresa ha advertido de que producción nacional de gas y las reservas a disposición no serán suficientes para cubrir las necesidades del país balcánico, creando una "situación extraordinariamente seria" que requerirá una "racionalización máxima", ha informado la agencia croata Hina.
Otro tanto sucede en Rumanía, donde el suministro de gas ruso ha caído un 70 por ciento, al interrumpirse por completo el flujo por el gasoducto Isaccea 2, en la frontera con Ucrania, según informa el ministerio rumano de Economía. En Grecia, las autoridades informan de un corte total.
Pese a ello, el primer ministro rumano, Emil Boc, asegura que el Gobierno tiene la situación bajo control y que la población no tendrá que sufrir a causa de esta situación, si bien admitió que podría haber problemas si las temperaturas invernales caen a menos de -15 grados centígrados
Antes de confirmar que, tal y como habían advertido fuentes gubernamentales de Bulgaria, la interrupción de los suministros rusos se produjo esta madrugada y afecta al combustible que vende el gigante Gazprom y que atraviesa Ucrania para llegar a otros países europeos, INA había comunicado que los suministros se habían reducido un 18 por ciento a última hora de ayer.
La compañía ha señalado que en la racionalización del combustible que se prevé necesaria mientras no se solucione el conflicto entre Moscú y Kiev que ha provocado la extraordinaria situación en Croacia, tendrán prioridad los hogares, hospitales, parvularios, escuelas e instituciones similares.
El conflicto estalló el día 1 de enero, cuandoUcrania se negó a aceptar los nuevos precios que Moscú quiere cobrarle por el suministro. Desde ese momento, según fuentes rusas, Ucrania empezó a robar gas de los gasoductos que conectan Rusia con el resto de Europa. Por esta razón, Rusia ha decidido cortar los envíos que cruzan suelo ucraniano. En su defensa, Kiev ha dicho que sólo está tomando el gas necesario para impedir que el sistema de transporte se deteriore.
Gazprom, dispuesta a negociar
El portavoz de la gasista rusa Gazprom, Serguéi Kupriánov, ha afirmado que el consorcio está dispuesto a reanudar las conversaciones con la gasista estatal ucraniana en Naftogaz "en cualquier momento".
"Las declaraciones sobre el propósito de reanudar las negociaciones sólo el 8 de enero nos sorprenden; nosotros estamos dispuestos a comenzar la negociaciones en cualquier momento en vista de la situación de crisis", ha dicho Kupriánov en una comparecencia ante la televisión.
Agregó que la "situación es demasiado grave como para esperar dos días más".
El portavoz del Gazprom hizo estas afirmaciones poco después de que el presidente de Naftogaz, Oleg Dubina, anunciara en Kiev que viajará a Moscú el próximo jueves para reanudar las negociaciones con el consorcio ruso sobre los suministros y el tránsito del gas.
La Unión Europea lo considera inaceptable
Por otra parte, un portavoz de la presidencia de turno de la Unión Europea, que le corresponde a la República Checa, y la Comisión Europea han asegurado que los cortes impuestos por Rusia son "inaceptables". Además, han exgido el restablecimiento "inmediato" del suministro de gas.
Los cortes de suministro se produjeron sin aviso previo y "en clara contradicción" con las garantías dadas por las máximas autoridades rusas y ucranianas de que sus tensiones bilaterales no afectarían al suministro hacia la Unión Europea. La UE ha instado a Rusia y Ucrania a que concluyan sus negociaciones de manera definitiva y zanjen su disputa comercial bilateral.
El diálogo con ambos países será intensificado para que puedan alcanzar un acuerdo con rapidez, indica el comunicado.