El vicepresidente segundo y ministro de Economía, Pedro Solbes, ha advertido a las Comunidades Autónomas de que la adopción del nuevo modelo de financiación autonómica también requiere su colaboración para alcanzar un consenso y ha señalado que "la ausencia de un acuerdo" no puede ser considerado "un incumplimiento" por parte del Gobierno
"Las Comunidades Autónomas deben también asumir las responsabilidades y no limitarse a pedir más recursos al Estado", ha subrayado Solbes en su comparecencia ante la Comisión de Economía y Hacienda del Congreso de los Diputados.
En este sentido, Solbes ha comentado que "los gastos en educación, sanidad y servicios sociales [cuyas competencias están transferidas a las Comunidades Autónomas] han crecido estos años en el conjunto de las Comunidades Autónomas en el mismo porcentaje que el resto de gastos. Por lo tanto, no se puede afirmar, para todas ellas, que los problemas de financiación los tienen por el aumento de los gastos en servicios públicos".
Negociación multilateral
Solbes ha defendido que la propuesta presentada por el Gobierno en julio "sigue siendo un buen punto de partida, sobre la base de que ninguna Comunidad Autónoma saldrá perjudicada", para la negociación, que, ha insistido, "será difícil y compleja".
El ministro de Economía también ha señalado que el nuevo modelo de financiación autonómica debe ser armónico y ajustarse a las necesidades de todas las regiones, por lo que ha descartado negociar aisladamente con cada una de las Comunidades Autónomas : "las negociaciones bilaterales son imprescindibles, pero también las multilaterales", ha comentado.
Así, Solbes ha recordado que el modelo de financiación requiere la colaboración de las Comunidades Autónomas, pero "el Estado puede hacer prevalecer sus criterios" si no hay acuerdo. En cualquier caso, el vicepresidente económico ha reiterado que el Ejecutivo seguirá trabajando para acordar un nuevo sistema que entre en vigor en 2009 y que en 2011 alcance "plena vigencia".
Asimismo, el ministro de Economía ha subrayado que el nuevo sistema "cumplirá" con todos estatutos de autonomía y con la Constitución, indicando en dos ocasiones que la falta de acuerdo no supone un incumplimiento, en concreto, del Estatuto de Cataluña, en lausión a la fecha tope fijada en el texto autonómica, que era el 9 de agosto.
Críticas del PP
Por su parte, el portavoz de Economía del PP, Cristobal Montoro, ha criticado la falta de concreción del ministro, al que ha instado a precisar en cuanto se van a elevar los recursos destinados a las autonomías. Asimismo, Montoro ha criticado al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, al que ha acusado "hacer novillos" al no comparecer él mismo en lugar de delegar en Solbes.
La Diputación Permanente del Congreso de los Diputados aprobó la comparecencia del vicepresidente económico la semana pasada, después de que Iniciativa per Catalunya retirara su petición para que compareciera el propio presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.
El Ejecutivo acordó con ICV que sería el ministro de Economía y no Zapatero quien acudiría a sede parlamentaria para dar cuenta de las negociaciones sobre el nuevo modelo de financiación, obviando así la petición del Partido Popular al respecto, que solo obtuvo el respaldo de Coalición Canaria, y eximiendo al presidente de exoplicarse ante las Cortes sobre este asunto.
La inflación, el dato positivo
Antes de su comparecencia, el ministro de Economía, ha opinado que el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) de agosto ha sido "bueno", ya que muestra una reducción "significativa", por lo que a su juicio es el dato "positivo de la jornada". Para Solbes, a otra noticia relevante del día -la caída en la compraventa de viviendas un 29,6% y el descenso del 37,7% en el número de hogares hipotecados en el último año- sigue la línea de lo que preveía el Gobierno durante 2008.
En este sentido, ha reiterado que este año y el que viene serán "complicados" y ha confiado en que la situación mejore en el segundo trimestre de 2009. También ha señalado que, aunque "no es un consuelo", esta situación complicada no se da sólo en España, ya que en Europa también hay dificultades.
En el lado negativo, las cuentas del Estado refeljaron en julio, por segundo mes consecutivo, un déficit de 9.965 millones de euros, el 0,89% del PIB, debido, principalmente, a la crisis del sector inmobiliario. Tras conocer estos datos, Pedro Solbes ha reconocido que será difícil cumplir con el objetivo de lograr un superávit en 2008 del 1,2% del PIB para el conjunto de las Administraciones Públicas (Estado, Comunidades Autónomas, Ayuntamientos y Seguridad Social), al señalar es mayor la probabilidad "de que el déficit total a fin de año no corresponda al superávit previsto".