Bombillas más ecológicas sí, pero sin que el gasto repercuta en las familias. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha afirmado que respalda el plan propuesto por el Congreso de los Diputados para sustituir las bombillas tradicionales por lámparas más eficientes, "sin que por ello se resienta el ya castigado bolsillo del contribuyente".
La Comisión de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino aprobó este miércoles, por unanimidad, una proposición no de Ley del Grupo Parlamentario Catalán por la que instaba al Gobierno a que apruebe antes de que acabe el año un plan para la sustitución progresiva y definitiva de las bombillas de filamento incandescente por las de bajo consumo en el plazo de tres años.
La OCU ha mostrado su apoyo a medidas como esta, "destinadas a incentivar el uso de bombillas de bajo consumo", pero ha señalado que, "como su precio de compra es elevado", sería conveniente que el plan que desarrolle el Gobierno tenga en cuenta las dificultades económicas de los consumidores.
Gastar un 80% menos de luz
En este sentido, la organización ha señalado que, aunque el precio de compra de este tipo de lámparas es más elevado, "a la larga compensan", ya que los consumidores que opten por sustituir las tradicionales lámparas incandescentes por bombillas de bajo consumo podrán disfrutar de la misma luminosidad, gastando hasta un 80% menos.
Además, la OCU ha recordado que con las bombillas de bajo consumo se consigue gastar menos recursos naturales y disminuir las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera.