- 27 de febrero de 2008: Chantal Sébire, antigua maestra de 52 años con estherioneuroblastoma, un raro tumor evolutivo en la cavidad nasal que la desfigura y le provoca un intenso dolor, exhortó al Estado francés a que acortase sus "atroces" sufrimientos. "He llegado al límite de lo que puedo soportar", dice. El médico que la trata se niega a actuar contra la ley, que no permite la eutanasia.
- 6 de marzo: Sébire se pone en manos de la Asociación por el Derecho a Morir con Dignidad (ADMD).
- 12 de marzo: La abogada de la mujer, Gilles Antonowicz, realiza una petición "excepcional pero sin embargo legítima" de eutanasia y califica la misma como "primicia" en Francia. Precisa que no pedirá la aplicación de la Ley "Leonetti" de 22 de abril de 2005 sobre el fin de la vida, que permite "dejarse morir" pero no aplicar eutanasia por acción.
- 13 de marzo: Para Jean Leonetti, diputado de UPM y cardiólogo que redactó la medida legislativa, la petición no entra en el marco de la ley. El consejero de salud de Nicolas Sarkozy propone que un colegio de profesionales dé una nueva opinión médica y la ministra de Sanidad, Roselyne Bachelot, cierra la puerta a una "eutanasia activa". Un médico de la ADMD se ofrece a matar a Chantal Sébire, a condición de que la justicia lo permita.
- 17 de marzo: El Tribunal de Gran Instancia de Dijon rechaza la petición de la abogada de Sébire, y ofrece la posibilidad a esta de acogerse al coma inducido previsto por la ley vigente. Antonowicz denuncia la "hipocresía total" de esta decisión y lanza un llamamiento a Sarkozy para cambiar la ley sobre el final de la vida.
- 18 de marzo: El profesor Jean-Claude Ameisen, miembro del Comité Nacional de Ética del país galo, estima que en casos como el de Chantal Sébire podrían ser tratados por una fórmula de "excepción" que permita ir "más lejos" que la ley de 2005.
- 19 de marzo: El doctor Emmanuel Debost, médico de Sébire, es recibido por Sarkozy en el Elíseo. La hija de Chantal Sébire informa a las autoridades de que ha encontrado muerta a su madre en su domicilio de Plombières-les-Dijon (Côte d'Or).
20 de marzo: el fiscal de Dijon, Jean-Pierre Alacchi, anuncia que se investiga su muerte pero que no hay elementos que permitan conocer sus causas y da a entender que quizá no se lleve a cabo la autopsia.