Dicen que llevó el cristianismo a Irlanda y que enseñó el noble arte de la destilación. Quizá por eso, dieciséis siglos después de su muerte, el día de San Patricio se ha convertido en una festividad global que se celebra en lugares tan remotos como Moscú o Tokio.
En Irlanda, epicentro de la 'marea verde', la fiesta se vive con auténtica pasión. Sólo en Dublín se concentran más un millón y medio de personas para ver el desfile que recorre las calles de la capital. En Estados Unidos, con una importante colonia irlandesa, la festividad es también un acontecimiento nacional.
En el 'pub' o en la Red
En España, los pubs irlandeses se convierten en el escenario principal de la celebración. La cerveza y la música celta, con sus jigas y sus 'reels', están garantizadas. Para los que no quieran salir de casa, el día San Patricio también se disfruta por internet. En el universo virtual de 'Second Life' también hay programadas actividades como un desfile, volar en helicóptero o un concierto de música en el legendario Blarney Stone pub.
Mitos y curiosidades
San Patricio Nació en Gales en el siglo V d.C. Cuenta la leyenda que se conviertió en un devoto cristiano después de permanecer prisionero seis años en manos de un grupo de invasores. Tras escapar, dedicó su vida a difundir el Catolicismo en Irlanda. Murió el 17 de marzo del 460 d.C.
A San Patricio se le deben algunos de los símbolos más populares de la Isla Esmeralda. Se cuenta que utilizó el trébol para explicar el misterio de la Santísima Trinidad. También enseñó a los irlandeses la fórmula para destilar el whisky.