El Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) ha impuesto dos años de sanción al presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), Pedro Rocha, por la comisión de una infracción muy grave según la Ley del Deporte, por el cese del secretario general Andreu Camps el pasado 20 de septiembre de 2002.
El TAD, cuya resolución fue avanzada por Onda Cero y Iusport, también le sanciona con una multa económica de 33.000 euros por otras dos infracciones muy graves: la rescisión del contrato con el despacho GC Legal de Tomás González Cueto, investigado como Rocha en el procedimiento que sigue el juzgado de Majadahonda por presuntas irregularidades en relación al contrato de la Superocopa de España, y la personación de la RFEF como acusación particular en el caso.
Recordemos que Marina Adela Porta Serrano, abogada del Estado, planteó en su momento una inhabilitación de hasta seis años para Rocha por la presunta infracción de tres acciones considerablemente graves. Rocha pasó de testigo a investigado en este procedimiento durante su testifical el pasado 12 de abril, el mismo día que fue proclamado presidente de la RFEF como candidato único, con 107 avales de los 138 posibles.
El TAD entiende que Rocha "suplantó el cargo de presidente de la RFEF"
Tres días después el TAD le abrió expediente, junto al resto de los miembros de la gestora que no han sido sancionados, por posibles infracciones muy graves al haberse extralimitado en sus funciones como presidente de la Comisión Gestora, igual que al resto de miembros de esta.
Posibles recursos aparte, la decisión del tribunal impide ahora que Rocha se pueda presentar a las elecciones que la RFEF convocará en septiembre.
Pedro Rocha, expresidente de la Federación Extremeña de Fútbol, fue vicepresidente económico de la RFEF desde 2020 hasta que sustituyó de forma interina a Luis Rubiales como presidente del organismo el pasado agosto, cuando este fue suspendido temporalmente por la FIFA, tras su comportamiento en la final del Mundial femenino y el beso no consentido a Jenni Hermoso, por el que va a ser juzgado, además de por coacciones a ésta.
La RFEF recordó que la FIFA ha manifestado "reiteradamente" la posibilidad de que España se quede "fuera de la organización" del Mundial de 2030 si hay una "injerencia clara" del Gobierno en la RFEF como sería la posible inhabilitación de su "legítimo" presidente, elegido el pasado abril.