El neerlandés Max Verstappen (Red Bull) ha vuelto a lograr la 'pole' en un GP de Fórmula 1, este sábado en Miami, y ya van siete consecutivas, seis en lo que va de temporada. El líder y vigente campeón del Mundial ha aguantado de nuevo el ataque de los pilotos de Ferrari, Charles Leclerc y Carlos Sainz, que se han clasificado delante del compañero de Verstappen, Sergio 'Checo' Pérez.
El español Fernando Alonso (Aston Martin) quedó en 15º lugar y no pudo entrar en la Q3. No está siendo un buen fin de semana para el bicampeón del mundo, que se vio obligado a abandonar horas antes en la carrera al esprint por un toque con su propio compañero, Lance Stroll.
Aston Martin había anunciado que introduciría mejoras en Miami, pero de momento el rendimiento de los coches de la escudería británica no está siendo el deseado, en la línea de los anteriores grandes premios.
Mientras, los pilotos de escuderías que a priori deberían ser rivales directos de Aston Martin, caso de McLaren y Mercedes, sí que lograron entrar entre los diez primeros.
Leclerc, más rápido que Sainz
Verstappen registró un tiempo de 1 minuto, 27 segundos y 241 milésimas, 141 milésimas más rápido que el monegasco Charles Leclerc (Ferrari), que como en la carrera al esprint saldrá desde la segunda plaza, mientras que su compañero de equipo, el español Carlos Sainz (Ferrari), saldrá tercero al superar por tan solo cinco milésimas al mexicano ’Checo’ Pérez (Red Bull), cuarto a 219 milésimas de ‘Mad Max’.
A la tercera va la vencida pareció decirse a sí mismo un Verstappen que no había conseguido la pole position en ninguna de sus dos participaciones en el Gran Premio de Miami, pero que sigue buscando culminar un fin de semana de récord, tras liderar los primeros libres, la clasificación de la carrera al esprint, la carrera de este sábado y ahora la clasificación para la carrera de este domingo.
Sólo le falta el broche final, que buscará conseguir este domingo en un circuito en el que acumula dos victorias y en el que sabe cómo adaptarse a las dificultades de un trazado urbano en el que apenas hay agarre, que sobrecalienta mucho los neumáticos y en el que es muy difícil adelantar por lo sucia que está la trazada en la zona menos pisada.