El Real Madrid es humano. Los blancos perdieron el primer partido de la temporada y también el primero en la presente edición de la Champions League. El Leipzig superó al vigente Campeón de Europa (3-2) en una primera parte marcada por la efectividad de los alemanes en los primeros compases del partido. Primero Gvardiol de cabeza y posteriormente Nkunku, aprovecharon la fragilidad defensiva de la zaga madridista para poner el encuentro 2-0 a los veinte minutos.
Los de Ancelotti redujeron diferencias al borde del descanso por medio de un cabezazo de Vinicius, pero terminaron sucumbiendo en una segunda parte donde los madrileños no fueron capaces de perforar la meta defendida por Blaswich. A diez del final, los germanos sentenciaron el choque con el tanto de Werner en el enésimo desajuste defensivo del Real Madrid.
Rodrygo volvió a poner la emoción en los instantes finales transformando un penalti, pero el luminoso no volvió a moverse. Este resultado complica el primer puesto, pero bastará con vencer a un eliminado Celtic en la última jornada de la Champions y, además, será en el Bernabéu.
Nkunku pone contra las cuerdas al Real Madrid
Un Madrid un tanto desconocido o al menos diferente, saltó al Red Bull Arena con la idea de presionar desde los primeros compases e intentar poner en apuros al cuadro germano en su estadio. Tchouameni pudo adelantar a los españoles a la salida de un córner, pero ese testarazo en el segundo palo se iba directamente al lateral de la red.
No obstante, iba a ser el Leipzig el primero en golpear. Saque de esquina de los alemanes, Haidara remata de cabeza cruzado, Courtois la salva a duras penas y en el rechace la empuja al fondo de la red el croata Gvardiol. El sexto de la Bundesliga aprovechaba la primera del partido y se ponía por delante en su estadio.
Nkunku pudo ampliar diferencias en una contra letal de los germanos. El atacante del Leipzig se planta sólo en línea de tres cuartos, Courtois sale fuera del área, el francés le regatea, pero su disparo no encuentra portería cuando tenía todo para poner el segundo en el marcador. Los bávaros seguían apretando y Courtois iba a salvar de nuevo a los blancos con un disparo de Haidara desde el costado derecho.
Tras la enésima ocasión de los alemanes, iba a llegar el segundo de los locales. Nkunku recibe dentro del área tras la poca contundencia de la zaga madridista y el francés define por arriba ante la mirada desesperada del meta belga. Dos mazazos en los primeros quince minutos y el cuadro madrileño contra las cuerdas en la primera mitad.
El choque se calmó y los blancos dominaban la posesión sin apenas poner en aprietos a Blaswich. El Leipzig se agrupó, juntó líneas y las posibilidades de hacer daño al equipo comandado por Rose eran mínimas. Sin embargo, en una de estas iba a llegar la mejor ocasión para los madrileños.
Contra de Vinicius por banda derecha, pelota filtrada para Rodrygo y el brasileño se encuentra con los guantes de Blaswich en el primer palo. En la jugada siguiente fue el turno de Vini. Golpeo en el área pequeña, pero la pelota sale demasiado centrada como para poner en aprietos al cancerbero alemán. El duelo se equilibraba y los de Ancelotti empezaban a crear peligro.
Justo antes de llegar al tiempo de refresco, el Madrid recortaría diferencias. Pelota por el carril diestro, Asensio arranca con velocidad, centro al corazón del área y Vinicius, con la cabeza, la coloca al lado del poste para recortar diferencias antes del descanso. Los blancos lo merecían y llevaban dominando el encuentro desde el segundo tanto alemán.
El Leipzig aguanta el chaparrón y sentencia
La segunda parte comenzó muy diferente. La gasolina de los germanos ya no era la misma y los blancos eran el actor principal con pelota y sin ella. Nkunku volvió a poner el corazón en un puño al Campeón de Europa, pero el colegiado señalaba fuera de juego cuando se plantaba solo ante Courtois.
Los minutos pasaban y el luminoso no se movía. Lucas Vázquez estaba muy activo en el costado diestro y sus centros llevaban peligro para la zaga del Leipzig. El conjunto madrileño sabía que el tiempo pasaba mientras que los de Rose esperaban atrás, ordenados y con el objetivo de matar el partido en alguna contra.
Hablando de contras, en una de estas pudo sentenciar el encuentro Werner. El internacional alemán se plantaba solo ante Rudiger, amagaba el disparo y finalmente golpeaba al palo largo rozando el poste derecho de la meta de Courtois. Vinicius tuvo la mejor para empatar, pero su disparo ante Blaswich se iba incomprensiblemente fuera.
Y si perdonas, terminas pagándolo. Simakan tira de velocidad por banda derecha, ve a Werner en el segundo palo, pone un centro exquisito y el alemán sentencia el partido para ponerse a un solo punto del Madrid en la tabla clasificatoria. Rodrygo puso la emoción a un minuto del final anotando un penalti claro sobre el brasileño, pero el marcador no volvió a moverse.
El vigente Campeón de Europa continúa en primera posicion, pero deberá vencer al Celtic en la última jornada para ser primero.