La tenista española Paula Badosa sufrió para pasar a cuartos en el torneo WTA 500 de San José. La número cuatro del mundo derrotó a la estadounidense Elizabeth Mandlik en tres sets y remontando una rotura de desventaja en el tercero 6-2, 5-7 y 7-6(5) tras dos horas y 32 minutos de batalla.
El grito de liberación de Badosa cuando vio la derecha de Mandlik acabar fuera resumió de la mejor manera su estreno en el cemento de San José, donde reaparecía tras perder contra la rumana Simona Halep en los octavos de final de Wimbledon.
Le espera un cuarto de final de alta dificultad, pues será el viernes contra la ganadora del duelo entre la japonesa Naomi Osaka y la estadounidense Coco Gauff. Con esta victoria vuelve a haber una española en cuartos del torneo de Stanford desde que Carla Suárez lo lograra en 2019.
Y eso que Badosa, pese a perder el servicio en el juego de apertura, había puesto el encuentro cuesta abajo con una contundente reacción que le llevó hacia la victoria del primer parcial por 6-2 en 37 minutos.
La española llegó a tener tres oportunidades de rotura con 2-1 a favor en el segundo set, pero no logró convertir ninguna de ella y perdió el saque en el juego siguiente. Pese a recuperarlo de forma inmediata, pagó un nuevo quiebre, con 5-5, que Mandlik aprovechó para igualar el partido y forzar el tercer set.
Fue en ese momento cuando Badosa estuvo contra las cuerdas. Tuvo que restar con un 5-4 y un 6-5 adverso, pero consiguió aprovechar las indecisiones de su joven rival para forzar el desempate.
Necesitó carácter, calma y lucidez para imponerse a una Mandlik que aguantó hasta el 4-3 a su favor, antes de cometer unos errores que le costaron el partido.
La hija de Hana Mandlikova
Badosa logró finalmente llevarse el desempate por 7-5 y podrá seguir peleando por un torneo que solo fue ganado una vez por jugadoras españolas. Lo logró Arantxa Sánchez Vicario en 1994.
Pese a la derrota, Mandlik se fue de la pista aplaudida por los aficionados, tras una actuación de alto nivel a sus 21 años. Número 240 del ránking mundial, Mandlik accedió al cuadro principal tras superar dos rondas de clasificación, ante la mexicana Fernanda Contreras y la suiza Jil Teichmann, y dio la gran sorpresa frente a la estadounidense Alison Riske, número 33, en la anterior ronda.
La jugadora nacida en Florida tiene una familia de grandes deportistas. Su madre es Hana Mandlikova, que conquistó dos Abiertos de Australia, en 1980 y en 1987; el Roland Garros de 1981 y el Abierto de Estados Unidos de 1985.