El Atlético de Madrid cae apeado en cuartos de final de la Champions League al no pasar del empate sin goles ante el Manchester City. A pesar de contar con todo el apoyo del Wanda Metropolitano, los colchoneros no pudieron hacer gol y el conjunto inglés se citará con el Madrid en semifinales, haciendo valer el 1-0 de la ida.
No habrá pues derbi en semifinales. El Madrid se verá las caras contra el Manchester City en la revancha de los cuartos de 2020. El Atlético se fue al menos con el aplauso de su afición, que recompensó de esa forma la entrega de los suyos.
El inicio del partido vio un intercambio de papeles y estilos, con un Atleti presionando arriba y un City contragolpeador. Papeles cambiados respecto al partido de ida. Joao Félix se convertía en la referencia ofensiva de los de Diego Simeone en el ataque.
Pero el conjunto de Pep Guardiola no se siente cómodo sin la pelota y paulatinamente trató de ganar la posición en el centro del campo para pasar a tener la posesión del balón.
El contratiempo para los 'citizens' vino en forma de choque entre Felipe y Foden, quien tuvo que ser atendido. Eso les rompió le ritmo y el partido entró en una fase de ida y vuelta que beneficiaba más los intereses rojiblancos. Solo faltaban las ocasiones.
El City tuvo la primera clara a la media hora, una doble ocasión de Gundogan tras recibir de Foden, que se quedó habilitado por uno de los pocos errores de Savic a la hora de hacerse balones sueltos en el área.
El Atlético pareció reaccionar con una internada de Lodi y un disparo lejano de Kondogbia que llegó rebotado a las manos de Ederson. Hasta entonces, ni un solo tiro a puerta en más de 30 minutos.
Tuvo que esperar al 56 con otro desde fuera del área de Griezmann para volver a despertar los "uy" de la grada. Tras 45 minutos sin goles ni ocasiones, en la segunda parte el Atleti pareció salir con otros bríos.
El Atlético y el Metropolitano arrinconan al City
La ocasión dio paso a los mejores minutos del Atlético y los de más apuros para el Manchester City. Pero a los madrileños les seguía faltando acierto de cara a portería y Simeone probó con un triple cambio, dando entrada a Carrasco, De Paul y Correa: velocidad, control y gol.
Previamente Guardiola había dado entrada a Raheem Sterling por Kevin de Bruyne y después se vio obligado a reemplazar al lesionado Walker por Akè. La lesión le dio a los ingleses unos minutos de tregua ante el acoso local.
El técnico de Santpedor quiso contener las llegadas con peligro de Carrasco y Correa con más peso en el centro del campo, dando entrada a Fernandinho por Bernardo Silva. El centrocampista había anunciado en la previa su marcha del equipo para sorpresa del propio Pep.
A los de Simeone solo les faltaba el gol y el técnico argentino se vio obligado a meter a sus dos delanteros centro natos, Luis Suárez y Cunha, sacrificando el talento creativo de Lemar y Joao Félix. Restaban diez minutos más el añadido.
La tuvo Cunha al poco de salir recibiendo una dejada con el pecho de Correa, pero rebotó en Laporte. Y en el saque de esquina siguiente no acertó a rematar Savic en posición forzada con Ederson fuera de su línea de meta. El Metropolitano trataba de dar oxígeno viendo el esfuerzo.
Había mucha tensión y se reflejó en una tángana provocada por una patada a destiempo de Felipe a Foden. La pérdida de tiempo era a los locales a quienes perjudicaba, pero más la expulsión del central colchonero.
Ahí se acabó el partido en lo táctico, porque lo poco que pudo hacer el Atlético fue colgar balones largos y rezar porque ocasiones como la de Gundogan no se conviertieran en la sentencia. La tuvieron Carrasco de falta directa y Correa en un balón suelto, pero se encontraron con Ederson.
En el lado positivo, los nueve 12 de añadido que les dieron por las constantes pérdidas de tiempo de los de Guardiola, ver para creer. Aunque no les siervieron de mucho.