La nadadora española Teresa Perales permanecerá en Tokio bajo observación y no viajará a España con el resto de la delegación nacional, tras concluir los Juegos Paralímpicos de Tokyo 2020, como consecuencia del cuadro de estrés y ansiedad que sufrió durante la noche del sábado al domingo, según han informado fuentes del Comité Paralímpico Español (CPE) a Europa Press.
La aragonesa, que se colgó la medalla de plata en los 50 espalda S5, tuvo que ser tratada por los Servicios Médicos del CPE y de la Villa Paralímpica, en cuya Policlínica estuvo siendo supervisada. Finalmente, la nadadora ha sido trasladada a un hospital de la capital japonesa, donde continuarán supervisando su estado.
Pese a que la ganadora de 27 medallas paralímpicas está "evolucionando bien", no podrá viajar de vuelta a España este lunes con el resto de la expedición y se quedará en Tokio acompañada por dos médicos del Equipo Paralímpico Español hasta que su estado de salud le permita regresar.